"Es apasionante ver cómo en 'Macbeth' la palabra crea la fuerza de todo"

Dicen que su nombre no se puede pronunciar dentro de un teatro, con la lógica excepción de los que la representan encima del escenario. Pero, una vez terminada la función, los supersticiosos ni mientan el título de esta obra. También hubo un afamado crítico británico que escribió una larga y profusa crónica de este texto shakespeariano, logrando no mencionar ni una sola vez el nombre de la tragedia británica.

Pero no es el caso. Macbeth, uno de los más difíciles, hermosos y sobrecogedores textos de William Shakespeare, llega al Festival de Otoño en Primavera -no es una errata, son cosas de Esperanza Aguirre- de la mano de uno de los grandes mundiales: Declan Donnellan. Con su portentosa compañía Cheek by Jowl, el escenógrafo Nick Ormerod y un reparto excepcional encabezado por Will Keen, actor británico que ya sedujo con este grupo en aquel inolvidable The changeling, de Thomas Middleton y William Rowley, en 2006. Desde entonces ha trabajado en más de una ocasión con y para producciones españolas.

El intérprete encabeza Cheek by Jowl, la compañía de Declan Donnellan

Para Keen lo más importante en Macbeth es que habla más de cómo es la dinámica de una relación en la que los cambios permiten pasar la culpa de una persona a otra: "Es casi un tratado sobre la psicología del mal, porque es en lo que profundiza, mucho más que en el poder. Vemos cómo dos personas se van convirtiendo en monstruos y locos por tomar decisiones equivocadas, pero el ángulo desde el que les observamos es siempre psicológico". Al hablar de la propuesta que han llevado sobre los escenarios sostiene que el montaje sitúa al público en una posición en la que los espectadores tienen que prestar su imaginación: "Se trata de una obra que habla de cómo las cosas se hacen sólidas y firmes a través de la palabra, incluido el desarrollo de la idea de matar... Es curioso y apasionante ver cómo es la palabra la que va creando la fuerza de todo". El actor, con su castellano fluido, aprendido junto a su mujer española, no oculta que Mac-beth le ha enseñado muchas cosas: "Meterse en su piel es una experiencia especialmente intensa y muy muy cansada, agota mucho por la inversión de imaginación que hace falta". Si se le pregunta si el personaje shakespeariano le ha enseñado que no es tan difícil ser un canalla, contesta entre risas: "Bueno, eso ya lo sabía, pero lo que deja claro Macbeth es que una vez has cruzado la línea que no se debe traspasar y que antes era un tabú, todo se acelera hacia la perdición y especialmente si se es como Macbeth, en cuyo interior hay una cierta represión y rigidez moral, pero si se pasa de la raya todo está permitido y ya no hay vuelta atrás... Eso es útil saberlo".

Aunque el montaje lleva sobretítulos en español, es recomendable leer la obra antes si no se entiende el inglés. Y si se entiende, también, pues el inglés shakespeariano no es ninguna tontería, y menos en boca de estos magistrales actores, entre los que se encuentra también Anastasie Hille en el papel de Lady Macbeth.

Macbeth. Naves del Español. Matadero Madrid. Del 26 de mayo al 5 de junio.