Educación penaliza a las AMPA de la red pública
La Consejería de Educación discrimina por primera vez a las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) de la escuela pública, que según datos oficiales es la mayoritaria y representa al 70% del alumnado matriculado. Educación recorta en un 43% las aportaciones a la Confederación de Padres Gonzalo Anaya, que ha sido la organización de padres más crítica con la política educativa de la Generalitat y, especialmente, con la gestión del consejero Alejandro Font de Mora.
En paralelo, la orden de ayudas a las asociaciones de padres de 2010 solo recorta en un 27% el presupuesto para la Confederación de Padres de Alumnos de Centros Católicos (Concapa), que representa a un número muy inferior de alumnos y padres.
"El tijeretazo a las ayudas a la formación de padres penaliza a las asociaciones de padres y madres de la escuela pública y castiga a la organización más potente en asociados", censuró ayer Gemma Piqué, presidenta de la Gonzalo Anaya. Esta organización, además del recorte, tiene que repartirse casi al 50% la subvención para la escuela pública con la Covapa, que es la confederación de padres más afín a la Administración educativa.
El año pasado la Gonzalo Anaya recibió 268.177 euros y la Covapa, otros 200.683 euros, según la resolución del 19 de junio de 2009 de la Secretaría Autonómica de Educación, que dirige Concha Gómez. Mientras, en el año 2010 las dos confederaciones percibirán en conjunto un total de 266.442 euros. Es decir, prácticamente la mitad que el año anterior.
La resolución del ejercicio anterior otorgaba 158.543 euros a las asociaciones de padres de alumnos católicos y este año recibirán 114.189; un recorte, pero mucho menor.
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