Los cálidos veranos de la villa

"Esta fotografía me la encargó el Ayuntamiento de Madrid para ilustrar el cartel de los Veranos de la Villa del año 1996. La niña que posa en la instantánea es mi hija María, que se puso a jugar cerca de la barandilla y por poco se cae. El hombre la pudo agarrar a tiempo. Al fondo están todos los tejados de esas casitas. Luego, la pareja echando la siesta, que es una actividad muy veraniega. Alrededor de ellos un montón de frutas, sandías, uvas... Y a la derecha, el carrito donde transportábamos todas las frutas. Ese día en el que hicimos la fotografía hacía mucho sol. Para mí el cielo de Madrid es un pedazo de la naturaleza que se ha colado en medio de la gran ciudad, un trocito de belleza, y eso es lo que expresa esta imagen con tanta naturaleza".