Educación crea tribunales sólo para maestros discapacitados
Tiene una hemiplejia, pero ha estudiado toda su vida en la escuela ordinaria, con sus compañeros. Lo mismo, en la universidad donde se licenció. Su forma de vida ha sido ejemplo de una "integración" plena en la sociedad. Pero ahora esta maestra, aspirante a acceder al cuerpo de profesores docentes de Secundaria, tendrá que examinarse en un tribunal aparte: sólo para discapacitados. La medida le parece una "humillación" en toda regla. "Es como estar en un gueto de lisiados", advierte uno de los maestros que preparan a los opositores. "Nunca se había hecho así", añade.
La orden de la Consejería de Educación del 27 de abril de 2010 que convoca el procedimiento selectivo de ingreso y acceso a las nuevas especialidades de Enseñanza Secundaria, profesores de Escuelas Oficiales de Idiomas y profesores técnicos de Formación Profesional segrega a los discapacitados que serán asignados, que opositarán en un solo tribunal. "Quienes participen por los turnos de reserva de discapacidad y de acceso a los cuerpos de subgrupo superior serán asignados al tribunal V1 de la especialidad correspondiente que tenga ese tipo de plazas". Fuentes de la consejería insisten en que "no hay voluntad de segregación" y destacan que el formato "ofrece una mejor relación entre opositores y plazas disponibles". "El año pasado se hizo del mismo modo, y no hubo quejas", reiteran.
Sin embargo, sindicatos y preparadores lo niegan. "Lo que decía la convocatoria de 2009 es que quienes participen por el turno de reserva de discapacidad serán asignados al tribunal de la especialidad correspondiente que tenga este tipo de plazas, con independencia de que en la medida de lo posible se pueda resspetar la provincia elegida".
"La gente con discapacidad, no lo es de un grado tal que no pueda pasar las pruebas con toda normalidad. Si no fuese así, no se podría presentar a la oposición", recuerda un maestro. Sólo se hacen adaptaciones temporales [en los tribunales] en caso de que una persona no pueda seguir el ritmo y necesite alargar un poco el tiempo del ejercicio oral. "Para eso no necesitan agruparlos a todos en el tribunal de los discapacitados. Estoy seguro de que, en la consejería, no les gustaría ver a sus hijos destacados así", remata.
Los afectados, todos licenciados con alguna discapacidad física, no quieren verse en un "tribunal-gueto" y consideran llanamente que "la escena supone un atropello a la dignidad de las personas". "Ni es ética, ni es estética", remata otro docente.
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