El 'crash' del ladrillo pulveriza el optimismo económico del Consell

El mercado laboral valenciano sigue en la UVI, y su estado empeora. Unos pocos indicios de estabilización -y, probablemente, la necesidad de reforzar su acción de gobierno- llevaron al Consell a anunciar en las últimas semanas la luz al final del túnel y a reivindicar el modelo económico valenciano. La Encuesta de Población Activa destruyó ayer ese optimismo: el desempleo creció en la comunidad autónoma en 71.000 personas durante los tres primeros meses del año, hasta alcanzar los 583.000 parados. Uno de cada cinco españoles está en paro (20,05%). En la comunidad autónoma la proporción se acerca a uno de cada cuatro (23,04%).

Las tripas de la encuesta dejan, además, datos preocupantes. El principal, el nuevo terremoto en la construcción, que sufre el peor revés en un año, pierde 27.000 puestos de trabajo entre enero y marzo, y pone de manifiesto que el ajuste del sector no ha terminado.

El paro crece un 1,23%, la menor subida relativa de España

Las dos oleadas anteriores de la Encuesta de Población Activa (EPA) habían permitido albergar cierta esperanza: el ladrillo fue el único de los grandes sectores valencianos que ganó algo de empleo en el segundo semestre de 2009. La información conocida ayer confirma que la leve mejoría se debió a los planes de estímulo públicos. Una vez pasado su efecto, el ladrillo vuelve a estar en caída libre. Desde que estalló la crisis, el sector ha perdido a un 42% de sus trabajadores.

La pésima evolución de la construcción convierte en secundarios los pequeños síntomas de recuperación de la industria: ganó 500 empleos respecto a la EPA del último trimestre de 2009, su primer dato positivo desde que empezó la recesión. Y el repunte de 6.800 empleados en servicios, el sector que, con diferencia, mejor ha encajado la crisis. La agricultura registró el peor dato en dos años, perdiendo 9.700 empleos respecto a la oleada anterior.

La valenciana fue la autonomía donde menos creció el paro en términos relativos (un 1,23%) en el primer trimestre de 2010. La Consejería de Economía y Hacienda se felicitó por ello. El territorio se situó, sin embargo, como la quinta comunidad con más proporción de parados (por detrás de Canarias, Andalucía, Extremadura, Murcia y Madrid). Y la tercera con más desempleados en términos absolutos (por detrás de Andalucía y Cataluña).

La víspera del Primero de Mayo, Comisiones Obreras reclamó "medidas de choque" para atenuar la escalada del paro. UGT pidió protección para los más castigados por la crisis: los 167.583 parados que, según sus cálculos, no reciben ningún tipo de ayuda económica. Un 12,52% de las familias valencianas, añadió el sindicato, se encuentran con todos sus miembros en paro.