Los empleados de Unicaja y Cajasur rechazan las bajas y prejubilaciones

Un día después de que las cúpulas de Unicaja y Cajasur sellasen una paz que desbloqueaba la fusión, todos esperaban que en la reunión de la mesa laboral de ayer se produjesen avances. Este grupo de trabajo, que negocia la manera en que afectará a los empleados la unión, apenas ha avanzado desde que arrancó hace cuatro meses. Y ayer los sindicatos decidieron no aceptar la propuesta de bajas incentivadas y prejubilaciones voluntarias que ofrecían las empresas, que siguen sin descartar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE).

Sobre la mesa está el plan de recortes, derivado de la penosa situación de la Cajasur, que cerró 2009 con 596 millones en pérdidas. Así, las cajas persiguen ahorrar unos 57 millones al año, lo que podría suponer la pérdida de 1.200 empleados, sobre todo de Cajasur, como calcula Boston Consulting. Estas cifras son una anatema para los sindicatos, que exigen que se ahorre sin ejecutar ninguna medida traumática.

La reunión de ayer, celebrada en Málaga, tuvo dos novedades, según informó CC OO. Por un lado, las entidades ofrecieron un plan escalonado para tratar de reducir los costes. La primera fase contemplaría la oferta de prejubilaciones o bajas incentivadas voluntarias a los empleados de más que hay en las servicios centrales o en aquellas oficinas que, al unirse ambas firmas, sean inútiles por estar demasiado cerca.

Los sindicatos se quejan de que esto sólo afectaría a los empleados de Cajasur. Si estas medidas no consiguieran un ahorro suficiente, se pondría en marcha la segunda fase, que ofrecería las mismas bajas incentivadas y prejubilaciones voluntarias a los empleados de Unicaja y Cajasur "con carácter universal".

Paralelamente, las empresas ofrecieron otra novedad: una medida de recorte que se basaría en una homologación a la baja de los salarios de toda la plantilla y que permitiese reducir el número de empleos sacrificados. En todo caso, si estas medidas tampoco se tradujesen en el ahorro necesario, las empresas siguen reservándose la aplicación de un ERE.

Tanto CC OO (mayoritario en Unicaja), como Aspromonte (mayoritario de Cajasur), UGT, Csica y Secar, decidieron rechazar el planteamiento de las cajas "pues eran incluso más duros que los que se han propuesto anteriormente", afirmó CC OO. Los sindicatos siguen reclamando alternativas "más imaginativas, como la eliminación de pluses del personal directivo".

Con el fin de seguir discutiendo y lograr avances efectivos, los sindicatos aceptaron la petición de Unicaja y Cajasur de crear una mesa laboral reducida en la que se facilitasen más datos económicos (algo que llevan meses reclamando los trabajadores) para poder trabajar. CC OO, UGT y Aspromonte contarán con tres representantes cada uno, mientras que Csica tendrá dos. La mesa reducida se reunirá el día 20.