El teatro sigue en pie de guerra

El mundo del teatro valenciano lleva meses movilizado ante lo que consideran un cóctel explosivo para su profesión: precariedad, recorte de las ayudas públicas y transformación (a peor y sin debate) del Circuit Teatral Valencià. El Sindicat d'Actors i Actrius Professionals Valencians (AAPV) recuperó ayer su gala de concesión de premios, coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Teatro, y la revistió de un tono reivindicativo ante lo que consideran una falta de disposición al diálogo de la consejera de Cultura, Trini Simó. Poco antes de que empezara la fiesta se conoció, además, un comunicado del Consell Valencià de Cultura en el que el organismo expresaba su "preocupación" ante la situación de las artes escénicas en el territorio e instaba a la consejera a reunirse con los profesionales para encontrar una salida negociada al conflicto.

La AAPV ha ampliado este año el número de categorías. Se trataba de reforzar el papel del sindicato y también de subir la autoestima de los trabajadores de un sector que vive horas complicadas, explicó su presidente, Ferran Gadea.

En su discurso (que se desarrolló bajo la forma de diálogo teatral), Gadea declaró: "Somos actores y actrices y solamente sabemos del arte de la interpretación. Somos actores y actrices y queremos trabajar de actores y actrices. Estamos preparados para dar lo mejor de nosotros allí donde se nos dé una oportunidad. Necesitamos ayuda. Necesitamos soluciones y estamos dispuestos a encontrarlas entre todos". Y respondía Juli Disla, también directivo del sindicato: "Por eso nos resulta incomprensible vernos en batallas absurdas, con puertas cerradas, mordiendo supuestas manos que supuestamente nos dan de comer y teniendo que pedir cosas tan básicas como ser escuchados y comprendidos".

Poco después Gadea agregaba: "Con el corazón en la mano nos sentimos capacitados y autorizados para decir: 'esto no es como yo querría', 'así no podemos estar' o 'esta consejera no nos gusta".

La relación con Simó parece difícil de recuperar. Los actores aprobaron un manifiesto en el que advertían del estado de "descomposición" del sector debido al "desmantelamiento" del Circuit Teatral, la escasez de producciones públicas y la situación de las salas "abocadas a cerrar". La consecuencia, señalaba el documento, es que las compañías agonizan y los profesionales se quedan sin trabajo. Más tarde denunciaron que actores y técnicos habían recibido presiones para no leer el manifiesto en las salas públicas.

El Consell Valencià de Cultura advirtió ayer que los cambios en el Circuit de Teatre introducidos por la consejería "sin previo aviso y sin posibilidad de negociación" puede tener "efectos no deseados y perjudicar seriamente a los municipios más pequeños" donde se han venido realizando representaciones gracias al programa. El Consell se mostró esperanzado en que la consejera fuera sensible a las reivindicaciones "por el bien de la cultura en general". Y lamentaba que "pese a todos los intentos realizados por tener una entrevista con la Consejería de Cultura, no ha sido posible que hayan encontrado tiempo es sus agendas".