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LAMBERTO ANDREOTTI | Consejero delegado de Bristol-Myers | nombres propios

Con un toque italiano

En el rascacielos que da sede a Bristol-Myers Squibb en la exclusiva Park Avenue de Nueva York ya tienen hecho el oído al inglés hablado con acento italiano. Hace justo un año, Lamberto Andreotti ascendía al puesto desde el que se dirigen las operaciones diarias de la multinacional. Ésa suele ser la antesala hacia algo más grande: el puesto de consejero delegado.

No hubo excepción de la regla en el caso de Andreotti. Esta misma semana, a sus 59 años de edad, era designado como sucesor de Jame Cornelius, que a los 66 años se jubila, aunque seguirá conservando la presidencia del consejo de administración de la biofarmacéutica. Al verle, no hay duda de quién es descendiente.

El nuevo capitán de Bristol-Myers es hijo del senador vitalicio y ex presidente del Parlamento italiano Giulio Andreotti. Pero su perfil va más allá de lo que pueda decir su árbol genealógico. Como dicen los que trabajan con el ejecutivo, era el "candidato natural" para ser designado consejero delegado, por su liderazgo y conocimiento de la multinacional.

Su perfil empresarial va más allá que su árbol genealógico

La gente confía en él. Pero, sobre todo, Andreotti conoce los entresijos de una industria en continua fase de transformación y consolidación a escala global. El ejecutivo asumirá su nuevo cargo el 4 de marzo, con la misión de construir sobre los cimientos creados en los últimos tres años y medio por Cornelius para que la compañía pueda ser competitiva.

Formado en ingeniería por la Universidad de Roma y con un máster del Institut of Technology empezó a trabajar para Bristol-Myers hace 12 años, con cargos de dirección en sus divisiones internacional y estadounidense. Antes de ser designado director de operaciones, desde septiembre de 2005 fue vicepresidente ejecutivo de BMS.

Su entrada en el gigante farmacéutico se produjo en 1998, como director general para Italia y responsable de la división de oncología para Europa. Llegaba de servir como presidente de la unidad especializada en tratamientos contra el cáncer de Pharmacia & Upjohn, donde entró tras adquirir ésta los laboratorios KABI Pharmacia, firma que marcó el inicio de su carrera.

Bristol-Myers Squibb, que cotiza en el mercado de valores de Nueva York, es uno de los grandes actores mundiales en el desarrollo de la nueva generación de medicamentos para tratar enfermedades graves. Un negocio que exige constante innovación e inversión y, sobre todo, agilidad para responder rápido a los avances biotecnológicos. -

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