FCC, menos cíclica y más internacional

FCC ha aguantado mejor de lo previsto la cuenta de resultados en 2008 y 2009, en lo más duro de la crisis, y se ha hecho menos cíclica, más diversificada, algo más grande y mucho más internacional, según resaltaba esta semana, en vísperas de la publicación de los resultados del grupo del pasado ejercicio (el jueves próximo), su presidente ejecutivo y consejero delegado, Baldomero Falcones. El consenso de los analistas atribuye al grupo controlado por Esther Koplowitz un beneficio neto en 2009 de 300 millones de euros, pero fuentes del sector creen que esa cifra será algo mayor.

Pese al agravamiento ininterrumpido de la crisis, que le ha acompañado desde su llegada al grupo -hace menos de tres años-, y pese a su negativa repercusión en los negocios de FCC y en el plan estratégico 2008-2010 que presentó en mayo de 2008, Falcones no se siente frustrado, sino más bien satisfecho de la labor realizada frente a un entorno mucho más hostil del inicialmente previsto. "Hemos reducido costes, sobre todo en los servicios centrales" y en partidas que no afectan a la capacidad de producción; "hemos mejorado la financiación y el endeudamiento" [FCC registró sobredemanda en su primera emisión de bonos canjeables por 450 millones y ha suscrito en 2008 y 2009 créditos sindicados por valor de 1.225 millones y 475 millones de euros]; "hemos aprovechado oportunidades" para hacernos con activos o empresas, y "nos hemos internacionalizado y diversificado" en los dos ejercicios pasados -2008 y 2009- y lo vamos a seguir haciendo, señala. Todo esto se está llevando adelante, dicen en FCC, sin abandonar las ideas eje del Plan Estratégico (eficiencia, orientación de la actividad a la creación de valor para el accionista, y Responsabilidad Social Corporativa).

El grupo reduce en un año sus costes en relación con la cifra de negocios en un 4%

En recursos humanos y dentro del plan estratégico, FCC tiene en marcha planes de stock options (opciones sobre acciones) para 300 ejecutivos y un sistema de dirección por resultados con bonos ligados a los resultados a tres años, a fin de consolidar un sistema de gestión en el que los responsables planteen los objetivos y los negocien con sus inmediatos superiores; es un plan a tres años, ligado a la remuneración anual. Un sistema que ha contribuido, por ejemplo, a gestionar con buenos resultados la morosidad en estos años de crisis y a ahorrar costes. "En los últimos doce meses hemos reducido los costes un 4% en relación con la cifra de negocios, que es una ratio que le gusta mucho, por ejemplo, al banquero Emilio Botín", comenta Falcones.

El primer ejecutivo de FCC se muestra, además, cautamente optimista sobre el ejercicio 2010. Cree que EE UU y en menor medida Europa han empezado a salir de la crisis y que la situación española, sin ser buena, no tiene nada que ver con la de Grecia y es mucho más sólida y menos dramática de lo apuntado por algunos periódicos y analistas internacionales.

"En nuestro caso no hemos dejado de potenciar por la crisis tres actividades que consideramos fundamentales y que son de crecimiento muy rápido -infraestructuras, servicios medioambientales y energías renovables-", señalan en FCC, y cuya demanda, agregan, debe reaccionar, y de forma casi inmediata, a una mejora del entorno económico. Y además, pase lo que pase a nivel mundial, Europa central, Asia y EE UU van a demandar infraestructuras, servicios medioambientales, tratamientos del agua y los residuos y energías renovables, agregan.

Aunque para FCC los mercados exteriores -que en 2005 suponían el 9,9% de la facturación total del grupo y ahora alcanzan el 44%- presentan perspectivas más favorables que el doméstico, su presidente confía, frente al anunciado plan de ajuste del Gobierno y a la prevista reducción del presupuesto de Fomento, en el plan de inversiones público-privadas para limitar sus efectos sobre la compañía. [Este plan extraordinario, estimado en 15.000 millones pero que podría incrementarse, no computa como déficit y está financiado en un 50% por el Banco Europeo de Inversiones (BEI)].

Falcones también cree que la incidencia negativa de los negocios del cemento e inmobiliarios en las cuentas de 2009 se reducirá en el primero de los casos y desaparecerá en el segundo.

La actividad cementera es cíclica, recuerdan en FCC. Además, dicen, en los últimos meses ha mejorado la solidez financiera de nuestra filial con una ampliación de capital y también su rentabilidad y competitividad con inversiones en algunas plantas y con la apuesta por el I+D, el aprovechamiento de energía y los nuevos productos.

Realia, anuncia Falcones, abandonará pronto los números rojos y lo hará con mucha solvencia porque cuenta con inmuebles "muy buenos" en España y en París, porque viene de realizar fuertes provisiones sobre sus activos, y porque su actividad es más patrimonial que residencial y está menos afectada por la crisis.

En infraestructuras y construcción, FCC está haciendo valer su experiencia y sus equipos en proyectos internacionales. En los últimos meses, y sólo por citar unos ejemplos, se ha adjudicado obras en el Canal de Panamá (un contrato de 187 millones de euros); se ha hecho, en consorcio con otras compañías, con una autopista en Eslovaquia (1.990 millones); con contratos para la construcción de cinco campos de fútbol en Polonia y Argelia (874 millones); tiene adjudicados o en construcción seis trazados de metro en distintos países (sólo el contrato de Singapur le supone 334 millones); varias presas y plantas de tratamiento de agua en Latinoamérica y África, y dos túneles ferroviarios en Alemania. Contratos que explican que la construcción fuera de España aporte a FCC ya más, un 53% del total, que la doméstica.