El proceso creativo
Luis Gordillo (Sevilla, 1934) y Alberto Bañuelos (Burgos, 1949) son dos artistas que se han movido siempre en el mundo de las formas geométricas. Uno sobre el lienzo y el otro sobre los minerales más contundentes. Los caminos para llegar al resultado buscado son tortuosos y complicados, llenos de dudas y de alguna que otra frustración. Pero el recorrido es, la mayoría de las veces, un trayecto tan apasionante como el resultado final, la obra de arte. La galería Salvador Díaz (Sánchez Bustillo, 7) ofrece hasta finales de marzo una exposición centrada en el proceso creativo de estos dos importantes artistas.
Las esculturas de Bañuelos están hechas de materiales procedentes de todo el mundo: mármol de Carrara, granito de Zimbabue, piedra de Calatora. El peso de cada pieza no impide que el artista consiga formas cuya levedad aparente trasladan al espectador al mundo de la poesía. Las esculturas están acompañadas de las maquetas en yeso de las que Bañuelos se ha servido para realizar sus instalaciones. Gordillo expone una única obra, Blancanieves y el Pollock feroz, un enorme lienzo que se muestra acompañado por las fotografías y bocetos que el pintor hizo para preparar la obra. Antes de lograr el perfecto ensamblaje de las formas geométricas, Gordillo descubre más de 60 posibles versiones, todo un detallado proceso de investigación con un resultado genial.
