La espantada del Consell en Fitur solivianta al sector turístico

"Si [Francisco] Camps no puede ir a los sitios que debe ir, no puede ser presidente". El empresario turístico, que reclama el anonimato, no puede ocultar su malestar por el abandono en que el Consell ha dejado al sector turístico en Fitur, Feria Internacional del Turismo, que se celebra estos días en Madrid. "Pasó como si fuera en Ferrari", apunta otro, refiriéndose a la efímera y rapidísima presencia del presidente de la Generalitat en la feria.

Acostumbrados a la masiva presencia y apoyo institucional en todas las ediciones de Fitur, los empresarios no podían disimular un malestar que se acrecentó cuando se supo que el vicepresidente económico, Gerardo Camps, tampoco iba a acudir a Fitur alegando una indisposición. La presencia de la consejera de Turismo, Belén Juste, acompañada de la de Cultura, Trinidad Miró y del consejero de Gobernación, Serafín Castellano, no fue suficiente para compensar las ausencias. Alguna tan notable como la del municipio de La Nucia. La sombra de Gürtel se dejó sentir.

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La ausencia del vicepresidente, además, obligó a suspender una rueda de prensa convocada. Belén Juste, no se atrevió con la comparecencia, incrementando la imagen de abandono por parte del gobierno valenciano. El enfado venía agravado por la crisis económica. "En estos momentos", añadió una fuente del turismo de Alicante, "el sector esperaba un especial apoyo".

La espantada de la cúpula del Consell fue criticada públicamente por el secretario general del PSPV-PSOE, Jorge Alarte, y por la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín. Alarte tildó de "inconcebible" la ausencia de Francisco Camps al que acusó de "esconderse" por temor a que "alguien le recuerde que para él Fitur es Orange Market, Gürtel y El Bigotes". El líder de los socialistas valencianos recordó que el turismo supone el 15% del PIB valenciano.

Alarte y Pajín realizaron una amplia visita al pabellón de la Comunidad Valenciana, antes de la cual realizaron unas declaraciones en el stand de Costa Blanca, espacio que cedió el presidente de la Diputación de Alicante. José Joaquín Ripoll no sólo tuvo la cortesía de facilitarles el espacio; además, estuvo presente durante los parlamentos y concluyó su deferencia con un saludo a los dirigentes socialistas.

La iniciativa de Ripoll levantó ampollas en el bando campista porque se produjo inmediatamente después de que la Generalitat impidiera a Pajín y Alarte la utilización del pabellón de la Comunidad Valenciana.

La delegación del PSPV-PSOE fue mayor que la oficial encabezada por la consejera de Turismo. Y tenía más morbo. La visita de Pajín al puesto del Ayuntamiento de Benidorm, gobernado por concejales ex socialistas desde que en septiembre presentaron una moción de censura, era la foto más buscada. Preguntada, Pajín dejó claro que Benidorm "es la capital del turismo" en la Comunidad Valenciana y mostró su disposición a visitar su stand "como siempre". Y el momento llegó, aunque se hizo de rogar. Benidorm fue uno de los últimos expositores en ser visitados. Pajín y Alarte entraron en el llamativo local creado a partir de colchonetas de playa. Hubo besos, sonrisas y gestos de simpatía entre los socialistas y el equipo que lidera el alcalde Agustín Navarro, del que forma también parte la madre de Pajín, Maite Iraola, que ayer no se encontraba presente en la feria.

En esta edición de Fitur los cambios de agenda de los políticos han marcado especialmente el ritmo de la feria. La presencia del presidente el miércoles hizo de éste el día con más peso político. Ayer se respiró un ambiente más laboral.

Pero al ser el día oficial de la Comunidad Valenciana la jornada se prestó a las declaraciones políticas. Leire Pajín manifestó "el compromiso" del Gobierno con el turismo valenciano y la consejera Belén Juste apostó por el futuro. Pero sus palabras traslucían el cambio que la crisis económica obligará a realizar a la Generalitat. Si durante los últimos años el Consell ha venido ocupando toda la superficie del pabellón 5 de Ifema, en el futuro lo más probable es que los metros cuadrados se reduzcan sensiblemente. La alternativa: la promoción on line. Internet y mercadotecnia para abaratar costes. La crisis del ladrillo se ha llevado por delante la economía y los años en que el Consell, diputaciones y ayuntamientos despilfarraban en ágapes y saraos múltiples en Fitur.

Ahora toca austeridad: La consejera de Turismo, defendió que si por ella fuera "hacía lo mismo pero con menos espacio".

Mientras, ayer las ruedas de prensa siguieron con su frenético ritmo habitual. El Ayuntamiento de Alicante firmó tres ediciones de Mediterranean Corporate Games, los "más importantes juegos deportivos para empresas de todo el mundo", según fuentes municipales. El encuentro se celebrará en octubre durante cuatro días y casi solapado con la Volvo Ocean Race y se prevé que atraigan a 2.000 personas.

Tampoco faltaron peticiones. La más novedosa llegó por boca de Francesc Colomer, portavoz socialista en la Diputación de Castellón y alcalde de Benicàssim. Colomer aprovechó la presencia en el pabellón turístico valenciano del director del Instituto Turístico de España (Turespaña), Antoni Bernabé, para solicitarle el máximo apoyo para promocionar el aeropuerto de Castellón, cuyas obras estarán terminadas este año.