El Ejido, sin servicio de limpieza

Sin servicios de limpieza viaria, jardinería o abastecimiento. Así amaneció ayer El Ejido (Almería) tras el plante de los 420 trabajadores de Elsur y de cinco subcontratas de la sociedad. Tras meses de incertidumbre en los que los impagos han sido una constante para 87 de estos empleados, las plantillas de estas firmas, cuyos responsables fueron encarcelados en la Operación Poniente, dieron un paso más en sus reivindicaciones al paralizar su actividad y concentrarse ante los almacenes de la empresa.

El lugar escogido respondió a un objetivo claro: que no saliera de las instalaciones vehículo o maquinaria alguna, algo que ni tan siquiera intentaron los operarios de Elsur.

Tras una larga jornada de protesta que continuará hoy, los trabajadores que intentaban forzar el pago de los 112.000 euros correspondientes a las nóminas de noviembre, la primera de las dos que aún no han sido satisfechas, recibieron respuestas agridulces de los responsables de la empresa y del Ayuntamiento.

"No hay ni una peseta en caja", se escudó la gerencia de la sociedad clave en la trama de corrupción del municipio que, para suavizar, aseguró que el pago de los salarios será una prioridad ante futuros ingresos, el más próximo previsto para la próxima semana, cuando se empezará a recaudar el impuesto del servicio de agua.

Los plazos aportados por Elsur suponen un severo revés para otros 86 operarios que hoy debían cobrar sus nóminas y que, con total certeza, dejarán de hacerlo en tiempo y forma.

Mientras la sociedad se parapetaba tras su falta de liquidez, el equipo de gobierno optaba por el ataque como mejor defensa al apreciar en la suspensión de los servicios una irresponsabilidad de los operarios. "Les pediría un acto de responsabilidad, puesto que no pueden paralizar los trabajos que afectan a todo un municipio", censuró la portavoz del equipo de gobierno, Adela Cantón. En su opinión, "el problema viene de las empresas de estos trabajadores".