Málaga comprará el jardín histórico de Villa Fernanda
La justicia impidió construir 55 viviendas en esa finca protegida
El Ayuntamiento de Málaga se ha comprometido a adquirir la histórica finca de Villa Fernanda, un jardín protegido con tres edificios de estilo regionalista de principios del siglo XX, para el que existía un plan, abortado por la justicia, para levantar 55 viviendas de lujo. En el pleno del pasado 23 de diciembre, el Partido Popular dio la sorpresa al aprobar una moción del portavoz de Izquierda Unida, Pedro Moreno Brenes, en la que se insta "al órgano competente" del Ayuntamiento a "adquirir para la ciudad" Villa Fernanda. La iniciativa de IU compele al equipo de gobierno a "preservar este espacio", situado en las faldas del monte Limonar, "expropiando, permutando o mediante compensación a los propietarios con otros terrenos de la ciudad".
El voto favorable del PP, partido gobernante en Málaga, resulta chocante ya que en en marzo de 2008, en este mismo mandato municipal, rechazó una solución similar, alegando que tendría un altísimo coste para las arcas municipales. Los técnicos de Urbanismo habían tasado los terrenos, propiedad de la promotora Piquío, en unos 24 millones de euros.
Villa Fernanda se ha librado por muy poco del afán enladrillador de la primera década del siglo XXI. El conjunto cuenta con tres edificios históricos con protección arquitectónica de primer nivel y un jardín, también protegido, con 172 árboles de 24 especies distintas. Esta riqueza patrimonial no impidió que en octubre de 2008 el Ayuntamiento aprobara, por silencio administrativo, una licencia de obras para levantar dos edificios de lujo con 55 viviendas. Sin embargo, las máquinas no pudieron entrar en el recinto porque en junio de 2009 la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía suspendió cautelarmente el estudio urbanístico por el que se otorgó la licencia.
"Deben adoptarse iniciativas para evitar la construcción de viviendas puesto que ahora existen medidas jurídicas que apoyan esa idea", se lee en la moción presentada en el último pleno de 2009 por Moreno Brenes. IU ya había solicitado la expropiación de la finca, ya que la resolución del TSJA no anula expresamente la licencia municipal, sino sólamente suspende el estudio urbanístico que la ampara.
Villa Fernanda figura en el catálogo de jardines protegidos del Plan General de Ordenación Urbana de Málaga, pendiente aún de aprobación definitiva. Esta normativa describe a la finca como un "excelente ejemplo de jardín privado en una de las clásicas zonas residenciales de la ciudad". Además, en otra sesión, el pleno acordó solicitar a la Junta de Andalucía que declarara el conjunto Bien de Interés Cultural (BIC).
Los planes para construir dos edificios de nueva planta en Villa Fernanda contaban con una fuerte oposición vecinal. El Defensor del Ciudadano de la Diputación, Francisco Gutiérrez, puso en duda la legalidad de esa actuación ya que entendía que se hacía un cambio indebido del uso del suelo y que no se habían solicitado informes sobre la afección a los bienes protegidos. Las obras en el recinto de Villa Fernanda obligarían a eliminar 36 eucaliptos, dos yucas y tres phoenix canariensis. Uno de los edificios se levantaría sobre la actual pista de tenis y el otro sobre la piscina.
En el anterior Plan General, de 1983, los terrenos de Villa Fernanda tenían la consideración de zona verde pública, esto es, un espacio intocable desde el punto de vista urbanístico. Sin embargo, en el PGOU vigente, de 1998, se cambió la calificación a "urbanizable para ciudad jardín", lo que permitía las nuevas construcciones, aunque con la obligación de mantener protegidos los jardines y los tres edificios de los años 20.
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