El dueño de Nilefós desoye el ultimátum del Gobierno

"Desesperación total". El presidente del comité de empresa de la fábrica onubense Nilefós, José Pérez Marroco, calificó con esas palabras la situación de la compañía situada en el Polo Químico de Huelva. Ayer finalizó sin resultados el plazo de dos días otorgado por la Junta al propietario de la empresa, Nitin Madhvani, para pagar las nóminas de los trabajadores, que siguen "a la espera" de recibir noticias del dueño, que abandonó la planta el pasado mes de julio.

Pérez Marroco agradeció las negociaciones que la Junta mantiene desde hace meses con el empresario de origen indio, pero reconoció que no ve luz al final del túnel. "Ya no podemos más", aseguró el representante de los trabajadores. La plantilla de Nilefós estaba compuesta por 110 trabajadores más unos 90 auxiliares antes del verano. El pasado 2 de julio tuvo que paralizarse la actividad industrial (producción de abonos) por la falta de liquidez. El dueño "se esfumó en aquel momento, sin más", recordó Pérez Marroco.

Meses de protestas

Los 56 trabajadores fijos de Nilefós se encerraron en la fábrica en señal de protesta el 31 de agosto. Estuvieron 40 días sin abandonar el recinto, en ocasiones sin luz -debido a sucesivos impagos-, y rodeados de material con potencial explosivo que carecía de vigilancia alguna. El 10 de octubre decidieron abandonar las movilizaciones en previsión de un supuesto acuerdo entre el propietario y la Junta. "Y en esas estamos", añade Marroco, que dice seguir confiando en las negociaciones de la administración.

El Gobierno autonómico, junto con los sindicatos, intenta que el dueño abone, al menos, los cuatro meses de nóminas atrasadas que se debe a los trabajadores. Pero nada. Hace tres semanas se anunció la llegada de un posible inversor, pero antes Madhvani debe ceder la gestión de la fábrica y abonar las deudas pendientes. Entre ellas, los 2,3 millones de euros que la Junta le dio en forma de incentivos.

La Junta declaró ayer que, además de las acciones administrativas que ya se han iniciado para que el propietario cumpla sus obligaciones, sigue insistiendo para "concretar una reunión" y facilitar así la entrada del nuevo inversor. "Todo depende de la voluntad y colaboración del dueño de la empresa", aseguraron fuentes de la delegación del Gobierno andaluz.