Los jueces piden reagrupar las sedes judiciales y acabar con la dispersión

Los corrillos de la presentación del año judicial, en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, hacían referencia a los recovecos del caso Gürtel, pero el discurso oficial, rubricado por Francisco Javier Vieira, su presidente, prefirió centrarse en las carencias y dificultades del gremio. Sobre todo, en denunciar el parón en el Campus de la Justicia, el proyecto estrella del ex consejero Alfredo Prada. "El parón ha sido una pésima noticia", subrayó Vieira.

Un frenazo que mantiene "la excesiva dispersión de los órganos judiciales", algo que se puede apreciar en el gráfico que acompaña a la información. Francisco Granados, actual consejero de Justicia e Interior, asistió al acto y poco antes del aperitivo explicó ante los periodistas que el proyecto está parado por "los efectos de la crisis", pero que en breve se reanudará.

A las críticas de Vieira se suma Antonio Álvarez-Buylla, decano del Colegio de Procuradores de Madrid, que pide que "dado que se ha abandonado el proyecto del Campus de la Justicia, se haga una reagrupación de los servicios, un registro único para no ir dando vueltas, y se potencie el uso de las nuevas tecnologías".

A la censura también se sumó el líder de la oposición Tomás Gómez, que calificó de "seudocomatoso" el estado de la justicia madrileña y exigió el fin de la dispersión de los edificios judiciales.

Por otra parte, el fiscal superior de la Comunidad de Madrid, Manuel Moix, planteó una reforma de la ley que regula la responsabilidad penal del menor para frenar "la preocupante proliferación de delitos cometidos por menores de 14 años".