"Derecho al trabajo" y "paz"

Garbiñe Biurrun (Tolosa, 1960) es desde ayer la nueva presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Superior vasco. Sucede a Manuel Díaz de Rábago, que ha ejercido esa función durante 11 años. La magistrada tomó posesión de su cargo en euskera y castellano con una intervención en la que se comprometió a ayudar desde la judicatura a "lograr la paz" y a pelear por el derecho al trabajo "con crisis o sin crisis".

A la toma de posesión, presidida por el responsable del Superior, Fernando Ruiz Piñeiro, asistieron, entre otros, las consejeras Idoia Mendia y Gema Zabaleta, y las vocales del CGPJ Margarita Uria y Margarita Robles.

Las primeras palabras de Biurrun fueron en recuerdo del ex consejero de Justicia Javier Caño, fallecido ayer. A continuación, destacó que, pese a la recesión, que multiplica el número de litigios laborales, la jurisdicción social vasca es la primera de España con menor tiempo de pendencia y una de las tres primeras por tasa de resolución. Se comprometió a que esos índices se mantengan.

Aunque la jurisdicción social no tiene "ni la responsabilidad, ni las claves de la actual crisis", sí debe garantizar la "igualdad de derechos" entre los trabajadores. Éstos, añadió, "deben ser el centro de las políticas públicas y las decisiones económicas, y el derecho al trabajo, consagrado en la Constitución, es un objetivo irrenunciable".

Biurrun aludió además a la amenaza que ejerce el terrorismo etarra sobre la judicatura y recordó a los magistrados asesinados por la banda José María Lidón y Rafael Martínez Emperador. Frente a esa amenaza, expresó su compromiso en contribuir "en la medida de lo posible" a lograr "la paz y la libertad".