_
_
_
_
Reportaje:

Una mujer contra los tópicos

La esposa del futbolista Ibrahimovic rompe estereotipos

"Es jodidamente simpática y muy inteligente. No voy a fardar de ella, pero cocina de maravilla", dijo el delantero sueco del Barcelona Zlatan Ibrahimovic la única vez que habló en público sobre Helen Seger Svensson (Malmoe, 1970), una mujer que rompe los tópicos de la mujer del futbolista.

La pareja se conoció en una fiesta en Rosengard, a las afueras de Malmoe, el barrio de emigrantes donde ambos crecieron. Ella no sabía siquiera a qué se dedicaba aquel joven enorme al que no prestó mucha atención, pero cuentan que él no paró hasta conseguir su teléfono y una cita. El noviazgo empezó cuando Zlatan jugaba en el Ajax y se consolidó en Turín. Desde hace ocho años viven juntos y tienen dos hijos, Maximilian -ahijado de Luciano Moggi-, de tres años, y Vincent, de uno. La Seger no tiene mucho que ver con el cliché que agrupa, a menudo injustamente, a las mujeres de futbolistas sólo por el hecho de serlo. En su caso, era millonaria antes de emparejarse con el ariete sueco, y lo suyo le costó: se pagó la carrera de Empresariales trabajando de camarera, primero, y más tarde en una tienda de ropa en el centro de Malmoe, en la que entró como vendedora y terminó siendo directora general. Posteriormente fue responsable del área de marketing en Escandinavia de la marca de relojes Swacht antes de convertirse en alto cargo de la aerolínea Flyme. Once años mayor que el delantero centro del Barcelona, antes de su primer embarazo conducía por Malmoe un Ferrari 360 Spider 1 de su propiedad, porque los coches de potente cilindrada son una de las aficiones que unen a la pareja.

Discreta, culta, tranquila y tan elegante como hogareña, la esposa del delantero centro del Barcelona sigue buscando casa en la zona noble de la capital catalana, pero el precio de los alquileres la tienen asustada incluso a ella. Ibrahimovic ha tratado siempre de mantener a su familia al margen de los medios de comunicación: "Lo diré sólo una vez: Helen es mi primera y última mujer".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_