La rifa del millón de euros

Tuvo la casa en venta cuatro meses, pero la inmobiliaria le dijo que se olvidara, que "la cosa estaba parada". Así que Doménico Vera, natural de Málaga y empresario en apuros, decidió voltear la fórmula: fundó una empresa, creó una página web y montó una rifa. El premio gordo es su casa de Alhaurín de la Torre (Málaga), valorada en 1,2 millones de euros. Cualquiera puede entrar en www.ganaunacasa.com y comprar participaciones del sorteo, que será el 27 de diciembre; "participar es muy fácil" promete Doménico. Cada número vale 30 euros, y hay 59.000. Y si no hay suerte y la casa se escapa no pasa nada, hay más premios: un Audi Q5, 25.000 euros... Así hasta 20.

Ésta es una práctica cada vez más extendida. Doménico cuenta que en Austria hay varios casos, "son los pioneros" asegura. Aquí en España también hay unos cuantos: un amigo de Doménico, con quien comparte la web, rifa su casa de Mijas; la familia Stübe, austriaca, sortea una villa en Mallorca; y un precedente, el madrileño Miguel Marina, montó una lotería por su piso de Ciempozuelos a cinco euros la papeleta. Doménico utiliza su propia técnica. "Creé una empresa con licencia de casino online para poder hacer rifas, loterías y demás". La abrió en Costa Rica, pues argumenta que "en España, el juego es monopolio del Estado. ¿Quién va a rifar su casa si tiene que esperar seis meses para la autorización además de pagar un elevado porcentaje de su valor por las tasas?". Así ahorra tiempo y dinero.

Si no vende todas las papeletas, rifará lo recaudado entre los participantes

"En lugares como Costa Rica, Gibraltar, o la Isla de Mann, la legislación de juegos y apuestas online está muy desarrollada" explica Doménico. "Claro, da mucho dinero. A mí me contaron en un bufete de abogados de la isla de Mann, que el 20% de los trabajadores de Gibraltar están relacionados con Bwin [el patrocinador del Real Madrid]".

La sorpresa que se llevó este malagueño es que cuando puso la web en funcionamiento, "más de 50 personas me llamaron para rifar también sus casas. Recuerdo una mujer de Tenerife que había avalado a su hijo en la compra de un piso. Ahora se han quedado sin trabajo los dos, la madre y el hijo". Le han llamado hasta de las islas Bahamas. Pero Doménico lo tiene claro. "Lo primero es vender mi casa, y después quiero ayudar a los demás, porque estoy harto. Los políticos gastan mucho dinero pero a la gente no le llega nada".

La casa es enorme. Sobre un terreno de 6.300 metros cuadrados, se erige una choza de 400. La piscina, el garaje, la casa de invitados y un huerto muy digno con árboles frutales completan el mobiliario. "Esto es una casa de ensueño, ¡yo hubiese comprado 5.000 euros en tickets!" confiesa riendo Doménico.

Pero el tiempo apremia. De momento hay vendidas 1.200 participaciones y tiene que llegar hasta 59.000. De todas formas, "si no llegase a venderlas todas para el día de la rifa, el 27 de diciembre, el dinero recogido se rifaría entre los participantes". Este año la lotería de Navidad se juega antes.