Calor asfixiante, lluvia repentina

El calor intensó que se vivió ayer en la mayoría de las provincias dará paso hoy a un descenso en los termómetros y unos chubascos moderados que llegarán a tormenta en el interior de la península y el valle del Ebro, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). La imagen de jóvenes bañándose en fuentes para huir del calor, que se repitió en muchos lugares del país, va a desaparecer de golpe. Al menos, de momento.

Ángel Alcázar, jefe de predicción de Aemet, explicó que las temperaturas variarán por la entrada de un frente en Galicia, que se instalará en la mayor parte de la Península. Aunque desaparecerá durante la jornada, la inestabilidad se prolongará incluso hasta el miércoles en algunas zonas y los termómetros marcarán menos de 30 grados. Incluso en las zonas más afectadas por las altas temperaturas de ayer. A mitad de la semana se instalará un anticiclón en todo el país y los termómetros volverán a subir hasta marcas parecidas a las registradas ayer.

Los termómetros superaron ayer los 40 grados en 19 provincias

El cambio va a ser drástico, porque ayer el calor sofocante, con temperaturas de hasta 40 grados e incluso superiores, se instaló en 19 provincias. Sevilla, Córdoba, Jaén y Toledo se encontraban en alerta naranja ante la posibilidad de calor extremo, mientras que en Aragón, Navarra, La Rioja, Madrid, el resto de Castilla-La Mancha, Lleida y unas cuantas provincias de Andalucía superaron los 36 grados de temperatura.

En Madrid se activó la alerta amarilla ante la previsión de que se superasen los 35 grados en la capital y en el sur de la Comunidad. Las predicciones auguraban cielos despejados con intervalos de nubes medias y altas. Y así fue hasta que por la tarde llegaron las tormentas. También en Extremadura, con temperaturas parecidas, la ola de calor afectó sobre todo a Cáceres y Badajoz. La alerta amarilla se repitió en las comunidades de norte y noreste de España. Otra historia fue el norte del archipiélago canario, donde los cielos estuvieron nubosos durante todo el día.

La Agencia de Meteorología, ante el calor inesperado que se estaba viviendo en la mayoría del territorio, recomendó a la gente no salir en las horas de calor extremo, desde el mediodía hasta el atardecer, y beber agua cada dos horas aunque no se tenga sed. Las altas temperaturas también representaban un riesgo para los incendios forestales y, por ello, la Junta de Andalucía decretó "la alerta máxima" para evitar problemas. En esta comunidad se sintió un calor sofocante en las provincias de Sevilla, Córdoba y Jaén. Un paso por detrás estaban Almería, Granada y Huelva, con ocho grados menos.

Todo eso quedará atrás durante la jornada de hoy. El frente que entra por Galicia producirá un contraste entre las temperaturas altas de la superficie y las bajas de la atmósfera, según informa el Aemet, lo que provocará lluvias muy fuertes.