"De pequeña era un poco marimacho"
"Eres mi última entrevista de hoy, ¿verdad?". Alesha Dixon, inglesa de 30 años, no sabe que esta noche aún tiene que mirar a los ojos de Flipy y bailar con Pablo Motos en El hormiguero. Ha pasado la tarde respondiendo preguntas sobre su nuevo disco, The Alesha show, y aguantando las comparaciones con Beyoncé, a la que idolatra. Lleva un vestido rosa de lunares blancos y un lazo negro en el pelo. Demasiado formal para, como Nick Hornby, ser hincha del equipo de Fàbregas, el Arsenal. Los cañoneros de la liga inglesa. Impecable, sólo pierde la compostura cuando, ante alguna pregunta indiscreta, suelta una sonora carcajada capaz de hacer que uno de sus pendientes de aro salga despedido.
"Que un chico baile bien da muchos puntos, pero no es imprescindible. Lo que sí tengo claro es que no podría salir con un guarrete"
EP3. Dicen que todavía puede meter un buen par de penaltis.
Alesha Dixon. No con estas plataformas que llevo hoy. Pero sí, todavía puedo marcar buenos goles. De pequeña era rebelde y un poco marimacho. Lo digo ahora vestida de rosa y con este lacito, pero he jugado más con el balón que con las muñecas.
EP3. ¿De qué jugaba?
A. D. Siempre he jugado con chicos y los muy inútiles me dejaban en el banquillo de reserva. Cuando me sacaban al campo me ponían de portera. Así que acababa enfadada y a puñetazos.
EP3. ¿Cuándo se dio cuenta de que cantaba bien?
A. D. Fue por culpa de Diana Ross. En secundaria formaba grupos con mis amigas, pero nunca lo pensé profesionalmente. Yo quería ser profesora.
Para comprender la historia de Alesha Dixon hay que viajar a
Welwyn Garden City, una localidad a pocos kilómetros de Londres. Hija de inglesa y jamaicano, utiliza su cepillo del pelo como micrófono para imitar a las estrellas de la tele. Sobre todo, a Neneh Cherry. Fue ver a la cantante mulata y ponerse como loca. "¡Mamá, se parece a mí", dijo. Cierto. Con 19 años monta su primer grupo, Mis-Teeq, con el que cuela algún tema entre los 10 más vendidos de las listas británicas. Poco más. Alesha trata de hacer carrera en solitario con irregular éxito. Se casa con un cantante inglés. Se divorcia. Se echa un novio futbolista. Se queda soltera. Hasta que en 2007 gana el concurso Strictly come dancing, la versión inglesa de Mira quién baila. Poco después publica su The Alesha show, un disco de pop bailable, humor y referencias a la limpieza, que ahora presenta en España.
EP3. Estuvo a punto de decir que no al programa de televisión. ¿Por qué?
A. D. Iba a firmar un contrato con la discográfica y tenía miedo de que se asustasen. Digamos que no es el programa más cool de la televisión británica.
EP3. ¿Ha visto la versión española del concurso? Aquí ha bailado la nieta de un dictador, un torero y Patxi Salinas.
A. D. ¿Y bailaban bien?
EP3. No sabría decirle. ¿Para qué le sirvió el programa?
A. D. Me ha dado oportunidades que antes no tenía y, como la audiencia era tan bestial, me ha abierto a nuevos públicos. ¡Eran 12 millones de espectadores!
EP3. Habrá podido conocer a todas esas estrellas que idolatraba de pequeña
A. D. No, todavía no. Neneh Cherry, Lauryn Hill, Janet Jackson o Madonna Son las mujeres que más me han influido.
EP3. ¿Qué le diría a Madonna?
A. D. Gracias por ser una mujer, por inspirarme y hacerme fuerte.
EP3. ¿Y después?
A. D. ¿Te vienes a cenar conmigo a un japonés?
EP3. Mejor unas copas, ¿no?
A. D. Ya no salgo tanto por la noche. Antes era más loca. Pero cuando pillo tres días libres No me gusta conocer a chicos cuando estoy borracha porque ven lo peor de mí. Prefiero conocerlos sobria para dar la mejor impresión.
EP3. En su canción Italians do it better canta: "Dicen que los italianos lo hacen mejor, / pero es falso. / Tú lo haces mejor". ¿Se lo decía a un español?
A. D. [Se ríe a sonoras carcajadas]. No, porque todavía no he conocido a ninguno. Es una canción de broma por la famosa camiseta que llevaba Madonna que ponía eso de "los italianos lo hacen mejor". Pero tampoco he conocido a muchos italianos. Ahora voy a Italia; cuando vuelva, te cuento.
EP3. ¿Cuántas veces ha oído hablar de sí misma como la nueva Beyoncé?
A. D. Me ocurre sólo en las entrevistas. Para mí es mucha presión porque ella es la número uno del mundo mundial. Incluyendo a chicos. Sin discusión.
EP3. ¿Por qué sus amigas le llaman Monica?
A. D. No soy una enferma de la limpieza, pero tengo mis manías como Monica, la de la serie Friends. Lo cuento en el tema The boy does nothing, sobre un chico que baila más o menos bien, pero no limpia la casa.
EP3. Bueno, eso nos da una pista de cómo le gustan los hombres.
A. D. Hombre, que bailen bien da muchos puntos, pero no es imprescindible. Lo que sí tengo claro es que no podría salir con un guarrete.
EP3. ¿No son los 30 una edad un poco tardía para convertirse en estrella?
A. D. ¿Por qué tenéis esa obsesión con la edad? Es sólo un número. Hay gente de 20 años mucho más madura que otra de 30. Depende más de las experiencias personales que de la edad.
EP3. Sí, pero parece evidente que una persona a los 30 años ya no es una joven promesa.
A. D. Yo no soy nueva. Ni joven. Aquí no hay reglas. Firmé mi primer contrato con 22 años y tenía muchas cosas que contar.
EP3. ¿Qué piensa cuando se ve en la portada de las revistas?
A. D. Es muy extraño porque es uno de los sueños que tienes de pequeña, pero nunca te acostumbras. Y mucho menos si es una foto horrible.
EP3. En una de esas portadas decía que nunca volvería a salir con un famoso. ¿Escribimos los periodistas lo que realmente dice?
A. D. No, lo sacáis todo de contexto. Se cuentan verdades a medias. Nunca me enfado porque entiendo que es parte del juego, pero probablemente nunca haya dicho eso.
EP3. Pero ¿saldría con otro famoso?
A. D. No lo sé. No pregunto a la gente en qué trabaja para salir con ellos. Me da igual que sea famoso o no. Si es limpio en casa, me vale.
The Alesha show está editado en Warner Music.
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