Lecciones de la crisis financiera
Urge más severidad e inteligencia en reguladores y supervisores
No será el último, pero sí es uno de los primeros libros en los que se realiza una amplia recapitulación sobre la vigente crisis financiera, tomando como referencia matriz el nivel y la adecuación de la regulación y supervisión del sistema por los poderes públicos y los organismos en los que están delegadas, con el fin de evitar los colosales efectos negativos que sobre la economía puede tener su colapso. Dicho colapso, con origen en los países más desarrollados, es el que estamos viviendo de hecho desde mediados de 2007 con la emergencia de la crisis subprime, y se manifiesta en la desconfianza de los consumidores en sus bancos y en la de estos entre sí. Esto ha conducido al bloqueo de buena parte de los mecanismos habituales de transmisión del crédito y, por consiguiente, también a la práctica ineficacia de las políticas monetarias convencionales de estímulo, siendo el desenlace el peor periodo recesivo que vivirá el conjunto de la economía mundial en muchas décadas.
TOWARDS A NEW FRAMEWORK FOR FINANCIAL STABILITY
D. Mayes, R. Pringle y M. Taylor Central Banking Publications
ISBN-10: 1-902182-55-3
ISBN-13: 978-1-902182-55-1
Aunque el libro está orientado principalmente a quienes tienen responsabilidades en las funciones de regulación y supervisión del sistema financiero, así como a quienes han de llevar la iniciativa política en estos temas (policymakers), también tiene un evidente interés tanto académico como para los profesionales del sector financiero.
Cuarenta estudios, resultado de la colaboración de más de cincuenta autores con una amplia experiencia internacional en estos temas, se dan cita en el libro para, en un orden bastante natural, abordar los tópicos principales diseñados por los editores. La introducción, a cargo de éstos, es una muy ordenada reflexión sobre los factores últimos desencadenantes de la crisis, el diferente papel que desempeñan la política monetaria y la regulatoria, mas allá de su conexión desde una perspectiva "macroprudencial" que, en todo caso, habrá de ser mucho más relevante que en el pasado. También la capacidad y adecuación de la respuesta de los policymakers con la necesaria redefinición de "un marco regulatorio y de supervisión más inteligente que severo" que abarque aspectos claves como el tratamiento de la prociclicidad, la liquidez, la disciplina de mercado, la actuación en el caso de caídas de entidades y una nueva estructura institucional.
Tras esta reflexión de fondo se abordan en las secciones siguientes los cambios acaecidos en el sistema y cómo se ha desenvuelto la regulación y la supervisión desde 1998 con la nueva perspectiva de Basilea II, algunos aspectos de la regulación puestos en cuestión en esta crisis como el modelo bancario de "originar para distribuir", las reglas contables y la transparencia informativa, el tamaño y complejidad de los conglomerados financieros internacionales y el control de la liquidez entre otros. También el relevante papel que han tenido en esta crisis algunas entidades de naturaleza no bancaria (compañías de seguros, hegde funds, compañías proveedoras de servicios financieros, ...), la innovación financiera y los mercados de derivados o la actuación de las agencias de rating.
En la sexta sección se apuntan algunas propuestas de mejoras. Destaca entre ellas la muy concreta de extender la regulación sobre "provisiones dinámicas" vigente en España realizada por los dos autores españoles que participan en el libro, Fernández de Lis, S. y García Herrero, A., que tan amplia aceptación parece estar teniendo internacionalmente por su naturaleza contracíclica y su efectividad hasta el momento en nuestro país.
El libro brinda en definitiva una excelente oportunidad para revisar con criterio de la mano de especialistas de reconocido prestigio las lecciones que cabe extraer de la actual crisis financiera sistémica internacional y los tópicos principales a los que habrá de enfrentarse la reforma de la vigente arquitectura regulatoria y supervisora. Bien es cierto que antes, en todo caso, habrán de seguir tomando medidas excepcionales tanto las autoridades nacionales de los principales países como los organismos internacionales competentes para evitar un mayor estrangulamiento del sistema financiero durante el intenso periodo recesivo que se avecina.
Daniel Manzano es socio en Analistas Financieros Internacionales (Afi).
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