Un avión en progresión
Contador gana el prólogo de la París-Niza a más de 50 kilómetros por hora
El primer signo de que el Lance Armstrong que regresó al ciclismo después de sufrir un cáncer no tenía nada que ver con el que tuvo que dejar temporalmente la bicicleta llegó cuando ganó el prólogo del Tour de 1999. La primera señal de que Alberto Contador sigue siendo todavía un hombre que progresa y de que todavía, pese a que ya tiene las tres grandes, Tour, Giro y Vuelta, en su cesta de la compra; pese a que tiene ya 26 años, es capaz de acrecentar su capacidad de sorprender al mundo la dio ayer al imponerse en el prólogo contrarreloj -casi diez kilómetros llanísimos, disputados bajo la lluvia- de la clásica París-Niza. Contador fue el único, en un trazado para rodadores puros, de vatios al por mayor, de superar los 50 kilómetros por hora de media. Que paren la historia, que un madrileño de Pinto, un avión en progresión, un Jacques Anquetil que sabe escalar, la está reescribiendo, podría gritarse.
El madrileño logra su segundo triunfo parcial de 2009, ambos contrarreloj
Lo podría gritar, entre sorprendido y admirado, un ciclista como Bradley Wiggins, doble campeón olímpico de persecución en Pekín, en la modalidad individual y la de equipos; un especialista en las contrarreloj llanas y cortas que llevaba semanas preparando específicamente el ejercicio de ayer. Wiggins, que se había quedado entrenándose en su Manchester para acostumbrarse al tiempo lluvioso que se esperaba en Francia, marcó el mejor tiempo hasta que salió Contador, quien le superó por 7 segundos. A su compatriota David Millar, otro superespecialista, le aventajó en 14 segundos.
"No me esperaba ganar, pero he tenido muy buenas sensaciones", dijo Contador, que ya se impuso en la clasificación general de la París-Niza hace dos años -el Tour, organizador de la carrera del sol, no le permitió participar en 2008-.
Es la segunda victoria parcial de esta temporada para el ganador del Tour de 2007, el mejor escalador del mundo: curiosamente la anterior, en el Algarve, también fue contrarreloj.
Otros dos españoles, Luis León Sánchez y Toni Colom, se colaron entre los diez primeros del día de una carrera cuyo próximo punto fuerte es la subida del Lure, el viernes.
Entre otros aspirantes a la victoria final, el australiano Cadel Evans cedió 31 segundos y 36 segundos el luxemburgués Frank Schleck.
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