_
_
_
_
ROCK | La semana por delante

Los bárbaros intrusos

Diego A. Manrique

Aparecieron con el terremoto del punk rock pero, por edad y por cultura, no eran punkis. Los Stranglers se encargaron de destacarlo con un comportamiento insolente y agresivo. Una lascivia de sal gruesa, un europeísmo anticomunista que iba contra el pacifismo dominante en el mundo artístico, una impaciencia con los comportamientos aceptados en la escena londinense de finales de los setenta. Y eran capaces de defender sus argumentos con las manos.

Inevitablemente, fueron condenados al ostracismo por sus colegas; la prensa musical les borró de su santoral.

Puede que los Stranglers resultaran antipáticos, pero obras son amores: han dejado más canciones memorables que muchos de sus más celebrados compañeros de generación. Construyeron un marmóreo repertorio con ecos de los Doors, del rock de garaje, de la psicodelia opiácea. Ese robusto cancionero justifica su Hits tour, que llega al Joy Eslava (Arenal, 11) el próximo jueves día 29.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_