"Te va a pasar algo peligroso"

La eliminación de la Copa de la UEFA está provocando escozor y malestar en el Sevilla. El club había puesto muchas expectativas en una competición de la que guardaba gratos recuerdos: campeón en 2006 y 2007. De ahí, que la derrota ante el Sampdoria cayera como un jarro de agua fría en el vestuario. Uno de los jugadores que recibió mayores críticas por su actuación en el encuentro fue Mosquera. Algunos medios de comunicación resaltaron la diferencia de nivel entre el lateral derecho y el resto de la plantilla. Ayer, por la mañana, el internacional colombiano no pudo más y estalló.

Mientras los periodistas esperaban el inicio de la rueda de prensa de Manolo Jiménez, en el vestíbulo del hotel de Palma en el que se aloja el equipo, que hoy se enfrenta al Mallorca (17.00, PPV), Mosquera se encaró con un redactor del diario As. "Si sigues escribiendo así de mí, te va a pasar algo peligroso", le espetó visiblemente alterado. "Me quedé paralizado por completo", contaba por teléfono Víctor Fernández; "le he preguntado si me estaba amenazando y me ha repetido que me puede pasar algo peligroso. No me lo esperaba". La mediación de Cristóbal Soria, delegado del Sevilla, evitó que el incidente tomara un cariz grave.

Ya por la noche, el colombiano se disculpó a través de una nota en la web oficial del club en la que mostró su arrepentimiento. Dijo que todo fue "fruto de los nervios" y aseguró que en ningún momento había pretendido amenazar al periodista. Jiménez también disculpó al jugador. "Está afectado por las críticas", dijo; "Mosquera ha jugado bien y ha jugado mal. Hay un Mosquera antes de la lesión y otro después. Ha alternado mejores y peores partidos. Pero es un jugador del Sevilla. Si está en condiciones, jugará. Si no, no lo hará".

El incidente entre Mosquera y un periodista escenifica el estado anímico que se ha instalado en el Sevilla tras la eliminación de la Copa de la UEFA, la primera en la que el equipo no supera la fase de grupos desde que existe este formato. Después del partido, el técnico evitó calificarla de fracaso y se limitó a juzgarla de "gran decepción". El viernes, minutos antes de coger el vuelo que les llevó desde Génova hasta Palma de Mallorca, el director deportivo del Sevilla, Ramón Rodríguez, Monchi, matizaba al entrenador. "La valoración de lo ocurrido es muy negativa. Sí, es un fracaso y estamos muy dolidos. Pero los grandes equipos se demuestran cuando se levantan en los momentos difíciles", comentó.

Uno de esos momentos es el que debe de estar viviendo Jiménez. El entrenador vuelve a estar en la picota y se cuestiona su capacidad para dirigir al Sevilla. "Había ya debate en el primer partido de Liga que dirigí al equipo y ganamos por 3-0. Entrenaré con la cabeza alta y cada vez con más exigencia que el día anterior", dijo al tiempo que aseguró sentirse respaldado por el club: "He sentido el mismo calor que siempre. Además, soy un luchador y seguiré trabajando como lo he hecho siempre".

El siempre comienza hoy frente al Mallorca. El técnico cuenta con la baja de Konko, lesionado ante el Sampdoria, pero recupera a Kanouté, aunque es probable que el malí se quede en el banquillo. La victoria permitiría al Sevilla irse de vacaciones con un buen sabor de boca y manteniéndose en el grupo perseguidor del Barça. Ya lo dijo ayer Jiménez: "La eliminación de la Copa de la UEFA no tiene solución. Pero queda la Liga".