_
_
_
_

"Nadie regala nada"

Villa es consciente de que aún tiene que hacer más con 'La Roja'

Nadia Tronchoni

"Alguno empezó a llamarle La Saeta", contaba ayer Albiol, compañero de Villa en la selección española y en el Valencia, al regreso de ambos de Bruselas. El delantero igualó el miércoles, ante Bélgica, los 23 goles de Di Stéfano, la verdadera Saeta, con La Roja. "Lleva muchos tantos. Seguro que va alcanzar a otros jugadores importantes", vaticinó el defensa central. De momento, le preceden Raúl, con 44; Hierro, con 29; Morientes, con 27, y Butragueño, con 26.

"No quiero incurrir en el tópico, pero es fruto del trabajo. Siento mucha felicidad por igualar a uno de los grandes", declaró Villa. "¿Alcanzar a Raúl? Ojalá", se planteó el Guaje con una media sonrisa ante la posibilidad de superar algún día al antiguo siete del equipo nacional.

Todo es posible. Pero el madridista, de 31 años, tuvo diez temporadas para lograr sus 44 goles. Empezó muy joven en la selección: a los 19. Villa, que cumplirá 27 en diciembre, debutó a los 23. "Nadie me va a regalar nada. Tendré que esforzarme cada día. Mantengo los pies en el suelo, orgulloso de lo que estoy haciendo, pero sabiendo que debo hacer más", advirtió el valencianista.

"Conozco mis números y estoy muy contento", añadió el de Tuilla (Asturias). Claro que los conoce. Tiene en su mente su promedio de goles por partido (0,59 con la selección y 0,66 con el Valencia esta temporada) hasta corregir a su interlocutor si se equivoca.

Calidad y agilidad

En el listado de los mayores goleadores de la selección los hay con mejor porcentaje de acierto que Villa. Aunque quedan pocos. Por encima de él se sitúan Lángara (con casi tres goles cada dos partidos en los 12 que disputó), Zarra (con 20 en 20) o Luis Regueiro (con 16 en 25). Pero éstos, que jugaron entre los años 20 y los 40, eran delanteros de corte clásico.

Di Stefano, que también supera a Villa con un promedio de 0,74 goles por encuentro, inició la revolución. Con él se amplió la zona de actividad del hasta entonces típico ariete. Y cambiaron también las cualidades exigidas al nueve. Aspecto que ha ensalzado, desde la excelencia de su juego, la actual campeona de Europa.

Villa no es fuerte ni robusto, pero ni la selección ni su equipo exigen serlo al anteponer la delicadeza, la precisión y la potencia: habilidad más calidad. Y, sobre todo, agilidad. Cualidades que le adornan.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Nadia Tronchoni
Redactora jefa de la sección de Deportes y experta en motociclismo. Ha estado en cinco Rally Dakar y le apasionan el fútbol y la política. Se inició en la radio y empezó a escribir en el diario La Razón. Es Licenciada en Periodismo por la Universidad de Valencia, Máster en Fútbol en la UV y Executive Master en Marketing Digital por el IEBS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_