_
_
_
_
_

El alcalde de Alaquás parte como favorito para liderar el PSOE valenciano

En pocas horas terminará la pugna por el liderazgo de los socialistas valencianos, por la que han competido cinco candidatos aunque, de momento, dos han quedado en el camino. A las ocho de esta tarde, primer día del congreso regional del partido, termina el plazo para presentar los 142 avales imprescindibles para lanzar una candidatura. Jorge Alarte, alcalde de Alaquás (Valencia), ha reunido casi el doble de ese número y, aunque las papeletas de apoyo no se traducen necesariamente en votos, sí parte como favorito según la impresión generalizada que comparte la dirección del PSOE.

Desde la Ejecutiva Federal se rechaza la tesis de que Madrid apoya a Alarte, a pesar de que sus contrincantes sostienen que este joven alcalde es el candidato preferido del vicesecretario general, José Blanco, y de la secretaria de Organización, Leire Pajín.

Es posible que así sea al final del proceso, aunque meses atrás en la dirección socialista se confiaba en que surgiera otro candidato diferente de Alarte y de su mayor contrincante, Joaquín Puig, diputado autonómico y alcalde de Morella (Castellón). Aunque la solidez política de Puig es reconocida en Madrid, su vinculación con el último presidente socialista de la Comunidad Valenciana, Joan Lerma, del que fue jefe de gabinete, le resta apoyo en la dirección federal e incluso en la organización valenciana. Anoche persistía la duda de si podría haber un acuerdo entre Puig y un tercer candidato, Francesc Romeu, que no reune avales suficientes.

Atomización

De la carrera se han retirado José Luis Ábalos y Ana Noguera, al constatar que no alcanzaban los apoyos necesarios para presentar candidatura, aunque la mera existencia de grupos que les animaron a presentarse muestra la atomización del socialismo valenciano. Ésa es la división que preocupa en Madrid.

La esperanza de la dirección está en que, tras la clausura el domingo del congreso -a la que acudirá el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero-, los socialistas valencianos, ahora gobernados por una gestora a causa de su división, empiecen a trabajar unidos en torno al nuevo líder y ofrezcan un proyecto atractivo a los ciudadanos. Cuando termine en 2011 la legislatura, los socialistas habrán estado 21 años en la oposición.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_