"Seguro que algún día volveré a unos Juegos"

Talant Duishebaev (Bishkek, Kirguizistán; 40 años) llegó a Atlanta sabiendo lo que era el sabor de una medalla. Había conquistado el oro en Barcelona 1992 con la CEI (Comunidad de Estados Independientes), un combinado de las antiguas repúblicas soviéticas. Pero en aquel verano de 1996 se colgaba el bronce por primera vez con la camiseta de la selección española de balonmano. Luego, vino otro más. En 2005 colgó las botas para hacerse cargo del Ciudad Real, con el que este año ha ganado la Copa de Europa.

Pregunta. Dos medallas de bronce con España. ¿A cuál le tiene más cariño?

Respuesta. Tengo cariño a ambas, pero quizás, por ser la primera para España, la de Atlanta es más significativa. Como nos quedamos con el gusanillo, en Sidney ya queríamos algo más que el bronce.

P. Ya había ganado un oro olímpico en Barcelona con la CEI. ¿Fue especial ganar su primera medalla con España?

R. Creo que lo más importante para mí fue el oro de Barcelona porque eran mis primeros Juegos. Pero, sabiendo la importancia para el balonmano español, fue algo bonito.

P. En Atlanta, la lucha por el bronce fue contra Francia. Al final, vencieron por 27-25. ¿Qué sintió durante el partido?

R. Nos vimos con la decepción de haber perdido la semifinal ante Suecia, pero tuvimos tiempo de recuperarnos. Francia contaba con un gran equipo. Ellos salieron confiados en que iban a ganar después de caer derrotados en las semifinales ante Croacia. Pero conseguimos ganarles.

P. En la fase de grupos, España se ha enfrentado ahora a Francia. Siempre Francia por el medio. ¿Cree que hay posibilidades de conseguir una medalla?

R. En el otro grupo están pasando un calvario y no se sabe cuál va a ser el cruce. Se pensaba que Dinamarca iba a ser primera y... mire. El día importante es el cruce [hoy, 14.15, hora peninsular española, ante Corea del Sur].

P. Juan Carlos Pastor ha mezclado la veteranía con la juventud de Víctor Tomás y Cristian Malmagro. ¿Cómo ve a la nueva generación de jugadores?

R. Es gente que ha jugado bastantes partidos con la selección. Es muy importante coger experiencia. Ellos son el presente y el futuro. En unos años serán los veteranos.

P. Dos de sus compañeros en Sidney, Demetrio Lozano y David Barrufet, están en Pekín. ¿No le da cierta envidia?

R. No, no. Me alegro por ellos. Llevan muchos años demostrando su profesionalidad y jugando a un gran nivel. Hay un tiempo para cada cosa y yo, después de los Juegos de Atenas, ya tenía claro que quería ser entrenador.

P. ¿Le gustaría volver a unos Juegos como técnico de alguna selección?

R. Por supuesto. Es el sueño de cualquier entrenador. Seguro que algún día volveré a unos Juegos.