Touriño llama al PSdeG a completar el "trabajo pendiente"

Los socialistas gallegos reunieron ayer en Santiago a su Ejecutiva y a su comité nacional para convocar oficialmente el XI Congreso del PSdeG, el primero que celebrarán teniendo responsabilidades de Gobierno desde el que tuvo lugar cuando Fernando González Laxe ocupaba la presidencia de la Xunta, hace ahora 20 años.

Emilio Pérez Touriño, secretario general del partido y presidente de la Xunta, eligió para la ocasión un discurso en el que señaló a sus compañeros la necesidad de mejorar la "posición de centralidad" que el PSdeG ocupa en el progreso de Galicia, así como su identificación con Galicia y con su futuro.

El congreso, explicó, debe consolidar la "marea de cambio" iniciada hace tres años y para conseguirlo es necesario que "compromiso, generosidad, trabajo, valentía, lealtad, imaginación y cohesión".

El partido, argumentó Touriño, debe ser capaz de convertirse en el instrumento de la sociedad gallega capaz de identificar y anticipando sus retos. Por esa razón, subrayó, precisamente cuando se presenta una "situación económica difícil", los socialistas deben "estar más comprometidos que nunca con la agenda del cambio". "Por eso tenemos tanto trabajo pendiente", subrayó, "hasta llegar el próximo año a la convocatoria electoral".

El presidente de la Xunta se refirió también al reto de la negociación del nuevo modelo de financiación autonómica, así como a la importancia de consolidar, en los Presupuestos del Estado para 2009, el 8% de inversión pública, imprescindible para "acelerar los compromisos" que tienen como horizonte el año 2012.

La hoja de ruta de los socialistas gallegos, explicó, pasa por resolver los problemas de los ciudadanos, darles seguridad y afrontar los desafíos de la sociedad. En ese contexto, debe producirse un "cambio ambicioso, de fondo, de calado; un cambio generacional", añadió.

La noticia de que la conselleira de Política Territorial, María José Caride, se incorporará a la Ejecutiva del PSdeG, se convirtió ayer en el principal tema de conversación entre los participantes en el comité nacional. La renovación de la dirección dará también lugar a la entrada en la Ejecutiva de una generación de dirigentes de entre 30 y 40 años, como es el caso de los alcaldes de Fene, Iván Puentes, Silleda, Paula Fernández Pena, As Pontes, Valentín González, y O Grove, José Cacabelos.

Muchos de los dirigentes socialistas que acudieron al comité nacional dan por seguro que el secretario general, Emilio Pérez Touriño, tiene intención de incorporar a la dirección a María José Caride, una de las conselleiras con más peso político en el Gobierno.