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Touriño respalda a Vivenda frente a las críticas de los alcaldes socialistas

La Xunta añade 204 millones en obras a las licitaciones para reactivar la economía

El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, antepuso ayer las normas de edificación impulsadas por la conselleira de Vivenda, del BNG, a las críticas que el decreto está recibiendo por parte de los alcaldes socialistas, que han llegado a impulsar un recurso ante el Tribunal Superior de Xustiza a través de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp).

El presidente rechaza someterse al "chantaje" de Feijóo en CRTVG
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En la rueda de prensa que el presidente ofrece cada semana después del Consello, Touriño se mostró ofendido de que alguien pueda esperar de él otra cosa y subrayó que está "al frente del Gobierno" y "responde de todas sus actuaciones". "Lo hago con pasión", añadió, "porque creo en lo que estamos haciendo; creo que es bueno para el país".

El responsable de la Xunta recordó que el objetivo de las normas de edificación "es mejorar las viviendas y la calidad de vida de los ciudadanos" y en ese marco, precisó, la consellería, a través de un comité de seguimiento, "está comprometida a aclarar, interpretar y dialogar todo lo necesario para la aplicación de esa norma".

Touriño situó las diferencias mostradas por la Fegamp en el terreno de la normalidad institicional y aseguró que las asume "democráticamente", porque los municipios lo único que hacen es "defender sus competencias". Este es un "un país compuesto" y, aunque "no renunciamos a nuestras políticas, debe haber cauces de diálogo y de respeto a la autonomía municipal".

La Xunta, argumentó, lleva a cabo una política de vivienda que es "una apuesta clara por la mejora de la habitabilidad" y lo que tiene que hacer es "se capaz de llegar a que se entiendan". "Hay que abrir ese camino", señaló, y el medio adecuado es el comité de seguimiento recién creado por la consellería.

En lo que Touriño no estuvo de acuerdo es en atribuir a los municipios socialistas la autoría de las críticas a la nueva normativa, porque fue la dirección de la Fegamp la que aprobó el recurso ante los tribunales. "Me pueden preguntar hasta las seis de la tarde y me van a encontrar siempre en la misma posición", advirtió a los periodistas.

Lo demás, añadió, son "lecturas sesgadas e interesadas", como cuando se habla de "pinzas o de maniobras orquestales en la oscuridad". "Son todas lamentables, responden a intereses espúreos" y sólo tratan de desgastar políticamente al Gobierno y poner en cuestión el entendimiento entre las administraciones, subrayó.

Touriño enfatizó su rechazo a cualquier decisión basada en criterios de partido: "Lo más fácil", dijo, "es descalificar y pedir el carné. ¿Es de los nuestros? Pues tiene razón. ¿Que no es de los nuestros? No tiene razón. No estoy en eso y nunca me verán en esa posición", sentenció.

El presidente se refirió a este asunto después de la celebración del Consello, que aprobó la licitación de otros 204 millones de euros de obras en el marco del plan de movilización de recursos con el que el Gobierno quiere contribuir a la actividad económica en plena desaceleración. Las obras más importantes se corresponden con la vía de alta capacidad entre la autovía de As Rías Baixas y la frontera portuguesa y la ampliación del puerto de Brens (Cee).

Las licitaciones de hoy elevan a 418 millones el valor de las que han sido aprobadas por la Xunta en lo que va de año, 2,3 veces más que en el mismo período de 2007. Una cifra que, en opinión de Touriño, demuestra el "ritmo excepcional" de las actuaciones puestas en marcha por su Gobierno.

El nuevo vial entre Celanova y la frontera portuguesa tendrá 62 kilómetros y costará 122 millones, aunque la concesión a 30 años (incluyendo el mantenimiento de la carretera) eleva esta cifra a 255 millones. El puerto de Brens, en Cee, en el que se invertirán 20,8 millones, multiplicará por cinco el tonelaje de los barcos que podrán utilizar sus instalaciones y podrá asumir parte del tráfico que hoy se dirige a A Coruña.

El Consello decidió también interponer ante el Gobierno central un requerimiento de incompetencia, paso previo a la presentación de un recurso de inconstitucionalidad, contra una orden que regula las subvenciones de la secretaría de Estado de Servicios Sociales. La Xunta entiende que esa orden vulnera el reparto de competencias al residenciar en el Estado la distribución de subvenciones en una materia que es de competencia exclusiva de Galicia.

El Gobierno también nombró, en su reunión de ayer, al primer director de la nueva Axencia de Protección da Legalidade Urbanística (APLU), cargo que desempeñará Hipólito Pérez Novo, hasta ahora subdirector general de Disciplina e Informes de la dirección general de Urbanismo.

Touriño también opinó acerca de la decisión del PP de bloquear la renovación de los dos puestos que corresponden al BNG en el consejo de administración de CRTVG mientras su director general no se elija por mayoría cualificada en el Parlamento. El presidente rechazó someterse al "chantaje" de Alberto Núñez Feijóo y aseguró que el líder de la oposición demuestra una "elevada y preocuipante inmadurez" al hacer política aprovechándose del fallecimiento de ua persona. "Hay que echarle bastante valor a la vida para utilizar eso como palanca", añadió el presidente.

La Xunta, concluyó, mantiene su compromiso de presentar, antes de que acabe la legislatura, un proyecto de ley de reforma de la CRTVG. "No hace falta que [Feijóo] utilice maniobras de tanta altura; vamos a presentar un proyecto para una nueva radio y televisión pública". "Demuestra tener un corto alcance si lo que quiere es cambiar un cromo por otro", subrayó.

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