El bipartito se une contra Feijóo
Touriño y Quintana defienden que Galicia ha avanzado con el Gobierno de Zapatero
Fue un debate sin momentos de gran tensión, sin ataques personales y hasta con muy pocas interrupciones. Los dos socios del bipartito de la Xunta no escenificaron la menor fisura entre ellos, incluso en asuntos como el Estatuto de Autonomía o las inversiones del Estado en Galicia, susceptibles de ofrecer visiones distintas entre socialistas y nacionalistas. Alberto Núñez Feijóo lo intentó sin éxito, mientras esquivaba la confrontación con Anxo Quintana -excepto en el bloque dedicado al autogobierno- y buscaba el cuerpo a cuerpo con Emilio Pérez Touriño.
El líder del PP ignora al del Bloque y centra sus ataques en el PSOE
Los socios de la Xunta culpan a Rajoy del fracaso del Estatuto
El presidente de la Xunta tuvo muchos problemas al principio para ajustarse al tiempo prefijado, aunque lo fue corrigiendo según avanzaba el debate. Todo lo contrario que el vicepresidente Quintana, quien calculó al milímetro sus intervenciones de principio a fin. Touriño y el líder del BNG protagonizaron un curioso intercambio de papeles: el presidente se lució más en el apartado de política social, que gestiona Quintana en la Xunta, mientras éste se empleó a fondo en el capítulo de infraestructuras, la especialidad del socialista.
Feijóo, en un tono mucho menos agresivo que Rajoy, abrió el fuego denunciando la supuesta quiebra de la solidaridad interterritorial bajo el Gobierno de Zapatero. El líder del PP arrancó y cerró el debate con una idea: ha cambiado el ciclo económico y es preciso, en consecuencia, "un cambio de rumbo".
Touriño se despidió proclamando su fe en "una Galicia que funciona" y "se siente cómoda en el tren de la España plural que lidera Zapatero". Quintana, citando a Castelao, defendió su idea de una "Galicia dueña de sí misma, con más capacidad de decisión y peso en Madrid".
ECONOMÍA. De la crisis al dinamismo
El debate sobre economía sirvió para calentar motores. Aún no habían tomado el pulso de la noche los líderes de los partidos cuando les tocó hablar de uno de los ejes centrales de la campaña, por lo que se centraron en repetir mensajes ya conocidos. Desde las apelaciones a la gravedad de la crisis de Alberto Núñez Feijóo al panorama de dinamismo económico dibujado por Emilio Pérez Touriño. Entre uno y otro, Anxo Quintana recomendó analizar la situación "sin catastrofismo ni autocomplacencia".
Feijóo le pidió a Touriño que empiece por admitir la crisis. "Difícilmente se puede resolver un problema si no se reconoce su existencia", le advirtió. La crisis es triple, según el líder del PP: "De hipotecas, de precio de los alimentos y de confianza". "La situación de Galicia y de España", le replicó el secretario general del PSdeG, "es mejor que la de hace cuatro años". Touriño insertó las dificultades económicas en el contexto internacional. Quintana, mientras, abogó por "una voz decisiva de Galicia en Madrid", para evitar que los gallegos "acaben pagando la peor parte" de la recesión.
AUTOGOBIERNO. Reproches por el Estatuto
Tardaron en aparecer los reproches a cuenta del fracaso del nuevo Estatuto, pero cuando lo hicieron coparon el bloque del debate. La cuestión la introdujo Quintana, después de que Feijóo denunciara el "parón del autogobierno" de la última legislatura y Touriño afeara al PP el "España se rompe' de Rajoy". Después intervino el líder del BNG: "Galicia necesita un Estatuto de nación", comenzó, para reprochar "el veto del PP" al proyecto, que atribuyó a una idea "centralista, carca y reaccionaria" de España.
Contraatacó Feijóo atribuyendo el fracaso a la falta de entendimiento entre los socios del bipartito, y al rechazo del PP y del PSOE al "Estatuto de nación" que defiende el Bloque. Si buscaba una fisura en el bipartito, no lo logró. Touriño rechazó la explicación del líder del PP. "Usted sabe que los dos partidos que sustentan la acción de Gobierno pusimos encima de la mesa un texto común". "Si hay un responsable del fracaso, ése fue Rajoy, que no le dejó pactar", añadió. Quintana apuntó la existencia de otro culpable: "Ese predicador radiofónico, que le marca a usted la línea".
INFRAESTRUCTURAS. Legado de Aznar o Nunca Máis
La intensidad de los ataques subió al hablar de inversiones del Estado en Galicia. Feijóo metió el chapapote en el debate. Blandió el Plan Galicia aprobado por el Gobierno de Aznar tras el Prestige, acusó al PSOE de "desbaratar" aquel compromiso y prometió su resurrección. "¿Por qué no tienen ni un solo kilómetro de AVE electrificado cuatro años después", le inquirió el líder popular a Touriño. "Porque heredamos una situación", respondió éste, "en la que el 60% del AVE del Atlántico no tenía ni el proyecto redactado". Y llegó el tiroteo de plazos. Feijóo vaticinó que la alta velocidad se demorará hasta 2018-2020; el socialista aseguró que será en 2012.
Touriño y Quintana presumieron del 8% de inversión en infraestructuras que el Gobierno de Zapatero destina este año a Galicia. El nacionalista acusó al PP de usar el Plan Galicia como "propaganda" y expuso su explicación al aumento de las inversiones del Estado tras el Prestige. "Fue por esto", afirmó mostrándole a Feijóo una foto de la manifestación de Nunca Máis en Madrid. "Pues habrá que volver", le replicó el líder del PP.
LIBERTADES PÚBLICAS Y POLÍTICAS SOCIALES. El sueño de la "niña de Rajoy"
Los tres líderes se disputaron ser los más comprometidos con los pensionistas, las mujeres, los dependientes y los niños. Los socios del bipartito volvieron a cerrar filas frente al representante del PP. Touriño abrió fuego afirmando que Galicia es la "más beneficiada" de España por las políticas sociales de Zapatero y, añadió, gracias a ellas "la niña de Rajoy" disfrutará de "libros de texto gratis", tendrá "acompañante" en el bus escolar y "estudiará inglés en Inglaterra".
"Los libros le costarán en realidad 60 euros y se los prestan, no son suyos", contestó Feijóo. El líder del PP desdeñó los logros aludidos por Touriño acusando al PSOE de aprobar una Ley de Dependencia "sin un duro" y el socialista le pidió que citara alguna ley social aprobada por su partido: "Sé que no es fácil, responda cuando quiera". Feijóo se jactó de que el PP "sacó de la quiebra la Seguridad Social" y creó "cinco millones de empleos". "Ustedes dejaron a Galicia a la cola en plazas de residencia", intervino Quintana señalando al líder del PP, al que pidió demostrar los compromisos "en la práctica".
