Las dos orillas del dinero
España es el primer emisor de envíos monetarios de emigrantes en la Unión Europea
Para seguir una remesa hay que tirar de la cuerda. La ruta comienza y termina en las colas de rostros que acuden a las agencias de giros. Es más que dinero, en muchos casos es el vínculo más fuerte de los dos extremos de la inmigración. Según la Comisión Europea (CE), España es ya el primer emisor de remesas de la UE. Y la Comunidad de Madrid, con un millón de inmigrantes, el motor principal del fenómeno, junto a Cataluña.
Para seguir una remesa hay que tirar de la cuerda. La ruta comienza y termina en las colas de rostros que acuden a las agencias de giros. Es más que dinero, en muchos casos es el vínculo más fuerte de los dos extremos de la inmigración. Según la Comisión Europea (CE), España es ya el primer emisor de remesas de la UE. Y la Comunidad de Madrid, con un millón de inmigrantes, el motor principal del fenómeno, junto a Cataluña.
En 2006 se enviaron 1.523 millones de euros desde la región, según señala el primer estudio sobre las remesas de la Comunidad, elaborado por la Consejería de Inmigración. Ecuador (23,4%) y Colombia (15,4%) encabezan la lista de países receptores. Este último, según la CE, es además el primer destino de todas las remesas que salen de España. La comunidad colombiana, con unas 83.000 personas, es la tercera en número de inmigrantes, después de la ecuatoriana y la rumana.
Al tirar de la cuerda de una de esas remesas se llega, por ejemplo, a los barrios populares del norte de Medellín. La ciudad (la segunda del país) ha cambiado; ya no arrastra los altos índices de criminalidad que la caracterizaron hace una década. Todavía se habla de narcotráfico, pero ya no es el tema de moda. Ahora se habla de remesas, de la gente que vive en ciudades como Madrid. En los barrios, las viviendas se han ido transformando gracias a los giros, mientras algunos comercios se atreven con nombres como Gran Vía o El Escorial. En la calle no es extraño ver a chicos que combinan una gorra de la NBA con la camiseta oficial del Real Madrid. Éstos son los dos extremos de una remesa.
