Otra machada del Getafe
El cuadro de Laudrup remonta al Sevilla, que no sabe ganar sin sus africanos
Definitivamente, la Copa de África le está sentando como un tiro al Sevilla. Y eso que el torneo, que por fin arranca hoy en Ghana, todavía tiene para tres semanas. Sin Keita ni Koné, pero más que nada huérfano de la pegada de Kanouté, el cuadro de Manolo Jiménez ha perdido la pujanza que le encumbró entre los grandes la última temporada y media. La derrota en la Liga en Bilbao y la eliminación de la Copa ante el Barça ya advertían de los males de un equipo a la deriva desde la marcha de Juande Ramos al Tottenham. Ayer pareció que Dragutinovic salvaba los muebles con un testarazo en el último minuto. Nada de eso. Acto seguido, Contra conectó una falta botada por Gavilán y mandó al cuadro hispalense al limbo.
GETAFE 3 - SEVILLA 2
Getafe: Abbondanzieri; Cortés, Cata Díaz, Mario, Licht; Pablo Hernández (Contra, m. 81), Casquero, De la Red, Granero (Gavilán, m. 71); Albín (Celestini, m. 74) y Manu del Moral. No utilizados: Ustari; Belenguer, Nacho y Kepa.
Sevilla: De Sanctis; Alves, Mosquera (Chevantón, m. 62), Escudé, Dragutinovic; Navas, Poulsen, Renato (Maresca, m. 46), Adriano (Diego Capel, m. 53); Luis Fabiano y Kerzhakov. No utilizados: Vargas; Duda, Fazio y De Mul.
Goles: 0-1. M. 16. Adriano dentro del área, tras un mal despeje de Abbondanzieri a una falta lanzada por Alves. 1-1. M. 31. Casquero, con la derecha desde fuera del área. 2-1. M. 58, Albín, tras una asistencia de Pablo Hernández. 2-2. M. 89. Dragutinovic, de cabeza. 3-2. M. 91. Contra, de cabeza tras una falta botada por Gavilán.
Árbitro: Rodríguez Santiago. Amonestó a Poulsen, Pablo Hernández, Escudé y Chevantón.
Unos 14.000 espectadores en el Coliséum Alfonso Pérez.
Dragutinovic puso el empate en el último minuto, pero le contestó Contra
Es lo que tiene el Getafe, que se enchufa ante los grandes. Cuanto más imposible es el reto, lo asume con más agrado. A fin de cuentas, su apuesta por el fútbol esbelto no deja de tener un lado masoquista en un fútbol en el que abundan más los remeros que los artistas. El ideario arrancó con Quique Flores, siguió con Bernd Schuster y Michael Laudrup no iba a ser menos. Por muchos problemas que padezca en la Liga, por mucho que tontee con el descenso, el equipo madrileño se mantuvo fiel a la tradición y saldó cuentas por la Copa perdida. El Sevilla sigue sin ganar en el Coliseum frente a una cuadrilla que se excita que da gusto ante los pesos pesados. No habrá nombres ilustres y la estructura seguirá siendo de un club de Segunda B, pero, a falta de canteranos, las promesas desechadas por el Madrid y el Valencia se están ganando los pistachos.
El último en seguir la senda de Albiol y Gavilán ha sido Pablo Hernández. El chaval lidera la estadística individual de centros lanzados. Lo mismo le dan por arriba que rasitos, como el que Granero cruzó al palo. Además, tiene desborde y lanza diagonales, como las que marearon a Dragutinovic, que se retrató mediada la segunda parte, cuando regaló el gol a Albín.
Mucho antes, el Sevilla se había adelantado tras una nueva pifia de Abbondanzieri. Alves lanzó un trallazo salvaje desde 35 metros, el Pato no supo atajarlo y Luis Fabiano no tuvo más que empujar el balón de cabeza. El Zamora de la pasada temporada no anda fino, pero no halla sustituto. Ustari, el fichaje más caro (6 millones de euros) en la historia del club, va camino de ser un brindis al sol.
Aun así, al Sevilla le resultó contraproducente el acierto de Luis Fabiano. Falto de excusas, el Getafe se desmelenó con Granero y Pablo entrando por las bandas. Bordando una ocasión tras otra, Casquero resurgió y volvió a marcar un gol de escándalo.A la fiesta se unieron Albín y Contra en el último suspiro.
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