Valderas contempla un pacto con los socialistas, "pero por escrito"
IU diseña una campaña basada en la ideología y la lucha contra el bipartidismo
"Queremos gobernar porque el PSOE por si solo no es capaz de gestionar planteamientos de izquierda". Con esta frase despejó ayer el candidato de IU a la Junta, Diego Valderas, la pregunta de si hace suyo el ofrecimiento del coordinador federal y aspirante a la presidencia del Gobierno, Gaspar Llamazares, para gobernar con el PSOE en el caso de que no obtenga mayoría suficiente. Valderas, quien presentó ayer la campaña de su formación, añadió, no obstante, varios matices a la propuesta del líder nacional: el acuerdo tendría que ser por escrito y avalado, mediante referéndum, por las bases de IU, como mandan los estatutos.
Aunque de puertas para adentro el órdago de Llamazares ha sentado muy mal en la organización andaluza -un dirigente comentó que se había postulado como ministro-, Valderas defendió públicamente su postura e incluso hizo una traducción de las intenciones del coordinador federal: "Lo que ha dicho Gaspar es que tenemos un modelo y somos responsables". En cualquier caso, las preguntas respecto a la posible alianza con el PSOE nunca tienen una respuesta airosa: "Si decimos que no vamos a pactar, nos acusan de entablar una pinza con el PP; si lo contrario, que somos la muleta de los socialistas", señaló otro dirigente. Éste se lamentó de que aún pesa la herencia del bienio 1994-1996 (IU y PP sumaba mayoría en el Parlamento), aun cuando ha transcurrido más de una década.
Valderas y el responsable de la campaña, Juan Vicente Acuña, hablaron de las ideas publicitarias que, por cierto, recupera como hilo conductor un lema que ya se empleó en 1986: Hace falta. Los mensajes se apoyarán en la ideología, en la reafirmación de la izquierda e, incluso, en la opción republicana. No en vano, argumentó el secretario de comunicación, José Luis Pérez Tapia, el 40,5% de los andaluces se autodenominan de izquierdas en las encuestas. Pero no avanzaron ninguna propuesta electoral, pese a que PSOE y PP, cuyo bipartidismo quieren combatir, llevan semanas avanzando ideas y ofertas concretas. Según miembros de la federación, el retraso en el arranque de la campaña tiene mucho que ver con la crisis que ha vivido IU en los últimos meses y que se cerró en falsó hace justo un mes para no encarar las elecciones completamente desechos. Ni siquiera hubo respuesta contundente al ardid electoral del PSOE, hace unos días, de vaticinar una pinza entre el candidato por Sevilla, Juan Manuel Sánchez Gordillo, y el líder del PP, Javier Arenas.
El candidato se volcará en su provincia
Diego Valderas echará el resto en su provincia, Huelva, para intentar lograr el escaño que se le ha resbalado de las manos en el último momento en las dos últimas convocatorias electorales. Dice que le faltan un millar de votos, y allí estará la mayor parte del tiempo, aunque participará en un mitin central en cada una de las provincias y acudirá a las plazas que le soliciten.
En total, IU ha programado 380 actos (entre mítines y encuentros sectoriales). Aunque se espera la presencia de Gaspar Llamazares, aún no se sabe ni dónde ni cuándo. También, según Valderas, se da por hecho que participen la alcaldesa de Córdoba, Rosa Aguilar, y la portavoz parlamentaria, Concha Caballero, pese a las discrepancias internas que llevaron a la última a renunciar a ir en las listas.
El gasto electoral rondará los 2,5 millones de euros, cifra en la que se incluye la emisión y distribución de 1,8 millones de periódicos gratuitos, 6.000 dípticos, 4.000 pancartas, la producción de un vídeo y la publicidad pagada en los medios de comunicación. Los mensajes están dirigidos sobre todo a los jóvenes, a quienes se tratará de convencer que es más importantes la alternativa, que representa IU, que la simple alternancia, único cambio que reclama el PP.
Respecto a la dificultad de encajar los mensajes del número uno por Sevilla, Juan Manuel Sánchez Gordillo, quien se opuso a la reforma del Estatuto, con la reivindicación de la coautoría del texto que señala el discurso general de IU, Diego Valderas aseguró que no habrá dualidad alguna. "Una vez aprobado el Estatuto, Diego Valderas y Sánchez Gordillo van cogiditos de la mano. Hay una apuesta por el desarrollo del Estatuto al máximo, y Gordillo irá incluso por delante en eso", dijo el candidato a la Junta.
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