El plan de depuradoras previsto para este año no estará completo hasta 2008
La Xunta atribuye la demora a las dificultades para obtener terrenos
La idea era aprobar este mismo año las 20 estaciones depuradoras de aguas residuales imprescindibles para completar el saneamiento de las rías y cumplir la directiva comunitaria que exige tratar los vertidos de las zonas más pobladas.
Pero, aunque el ritmo de adjudicación y licitación ha sido constante durante todo el año, al menos siete proyectos siguen pendientes y la mayoría de ellos no conseguirán superar todos los trámites legales antes del 31 de diciembre.
La Consellería de Medio Ambiente asegura que el retraso es consecuencia de la tardanza de los ayuntamientos a la hora de poner a disposición de Augas de Galicia los terrenos necesarios para construir las depuradoras. Y aunque admite la demora, el departamento que dirige Manuel Vázquez "valora el esfuerzo de la mayoría de los municipios". "No es fácil", aseguran fuentes de la Xunta, ubicar una instalación de estas características, como está poniendo de manifiesto el caso de Ribeira.
En estos momentos están pendientes las estaciones depuradoras de Malpica-Bergantiños, Raxó (Poio-Sanxenxo), Ribadeo, As Pontes, Ribeira, O Grove y Santa Comba. Augas de Galicia, la empresa publica autonómica que gestiona el saneamiento, tiene en sus manos los anteproyectos de las tres primeras (la de Ribadeo podría estar lista para la próxima semana) pero los trámites pendientes de las demás hacen más que probable su demora hasta el mes de enero del próximo año. La depuradora de O Grove está en proceso de exposición pública, a la de Santa Comba le falta un trámite en el ayuntamiento y la de As Pontes debe aún pasar por el pleno municipal y someterse a cuatro semanas de exposición pública para que los vecinos puedan presentar alegaciones.
De las 20 depuradoras previstas paras 2007, con una inversión global de 150 millones de euros (la mayor de la historia de Galicia en tratamiento de aguas residuales), ya hay 13 aprobadas por el Consello de la Xunta. Siete de ellas están en proceso de licitación (las de Carballiño, Bergondo-Gandarío, Catoira, Carral-Abegondo, Muros-Esteiro, Baiona y Xove) y otras tres (situadas en Santiago, Arzúa y Fisterra) ya han sido adjudicadas. Las tres restantes están pendientes de salir a licitación (Camariñas, Ares-Fene-Mugardos y Ponteceso-Corme).
Con todo, la Consellería de Medio Ambiente considera que el retraso es una cuestión meramente técnica y califica de "altamente satisfactorio" el grado de ejecución del plan, que a excepción de Ribeira esperan haber completado en las primeras semanas del año próximo. Si no surgen nuevas dificultades, la Xunta confía en que el conjunto de las depuradoras previstas estén en funcionamiento a finales de 2009 o principios de 2010. Será entonces cuando Galicia dé cumplimiento a la directiva comunitaria, vigente desde el 31 de diciembre de 2005, que obliga a depurar las aguas residuales de los municipios con más de 2.000 habitantes equivalentes (una expresión diseñada para contabilizar no sólo los vertidos domésticos sin también los que realizan las empresas).
En el caso de Vigo, cuya depuradora depende del Ministerio de Medio Ambiente, la fecha aproximada para la entrada en funcionamiento de la instalación son los primeros meses de 2011. La Xunta está todavía a la espera de que la Comisión Europea se pronuncie sobre el plan puesto en marcha para corregir los vertidos en la ría viguesa, sobre los que pesa una amenaza de multa de las instituciones europeas después de constatar una presencia elevada de bacterias fecales en áreas de producción marisquera.
Para corregir esta situación, Medio Ambiente realizó obras específicas de tratamiento terciario en las depuradoras de Cangas, Redondela y Soutomaior y otras actuaciones menores en diferentes puntos. La acción combinada de todas ellas, unida a las depuradoras de Vigo y de Baiona (los dos puntos más importantes de vertido), debería ser suficiente, en opinión de la Xunta, para solucionar el problema y evitar la multa comunitaria.
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