Menos remate que con Capello

El Madrid se encamina hacia uno de esos momentos que cada temporada se reserva para las revelaciones. Pronto, tal vez hoy (20.45, Canal +) contra el Olympiakos, sabrá si está en condiciones de dar el salto de calidad que le sitúe entre los grandes de Europa, o seguirá siendo el mismo equipo que desde hace años pierde estatura. A falta de más calor competitivo, los indicios apuntan a la segunda posibilidad. El entrenador, Bernd Schuster, admitió ayer que está preocupado. El alemán se hizo cargo del banquillo para elevar el nivel ofensivo del equipo y, sin embargo, este Madrid no sólo no juega bien. Además, tira menos a puerta que el de Capello.

"No me preocupa tanto la defensa como la segunda fase del juego", dijo ayer Schuster; "del medio del campo hacia arriba nos cuesta sacar el balón y dar el último pase para Ruud, Raúl o Higuaín. No funcionamos bien".

"Me preocupa que nos cueste dar el último pase", reconoce el técnico

Hace una temporada el Madrid disparaba una media de 15 veces por partido en Liga y Champions. Esta temporada no supera los 14 remates por encuentro. El decreciente poder atacante repercute en la retaguardia. Si con Capello soportaba una media de 14 tiros en todos los torneos, ahora le tiran 16 veces en cada partido.

El balance general habla de un decaimiento. La preocupación de Schuster está amparada por las cifras. El entrenador señala su centro del campo como fuente del desajuste. Lo ha hecho en el último mes y ayer repitió su advertencia. Detecta un problema en la línea que va de Diarra a Sneijder, y que tiene en Guti a su máximo responsable.

Guti es el gran pasador del equipo. Pero ante el Espanyol apenas recibió el balón. Anulado el media punta, no hubo alternativas. Guti insiste en que el Madrid tiene variantes: "Es cierto que los equipos nos están presionando arriba para que no podamos salir, pero tenemos recursos para superarlo. No sólo estoy yo. Hay más gente y más opciones".

La lesión de Diarra brinda a Schuster la alternativa de Gago. Schuster piensa en darle el timón del Madrid esta noche, y así conectar a Guti al circuito. El alemán cree que cuanto más capacidad tenga su equipo de maniobrar con el balón, menores serán sus inconvenientes en defensa. Para este fin, entiende que Gago será más útil que Diarra. "Mi confianza en Gago no empieza ahora", dijo Schuster; "es una opción muy importante en mi esquema. Esta temporada tendrá minutos para mejorar. Todavía tiene edad para eso".

Gago tiene 21 años. Robinho cumplirá 25 en enero. Su tiempo de aprendizaje se está terminando. El Madrid le impuso ayer una multa de 15.000 euros por llegar con un día de retraso de Brasil. Su entrenador, que le ha convocado para jugar hoy, se mostró comprensivo. "Robinho llegó en un momento muy complicado para el Madrid [2005]", dijo Schuster ayer; "era muy joven y le esperaron como al salvador. No le dieron ni el tiempo ni la tranquilidad, y él es el tipo de futbolista que necesita estar feliz. No hay que echarle presión ni responsabilidades. Él es capaz de inventarse una jugada por minuto. Eso es lo que queremos lograr".