100 días marcados por la incertidumbre

El socialista Patxi Lazcoz acaba de cumplir cien días al frente del Ayuntamiento de Vitoria, un periodo caracterizado por la incertidumbre en la formación del Gobierno foral y las vacaciones. Con todo, el equipo de gobierno ya ha marcado su impronta, al mismo tiempo que sus ediles han ido avanzando sus primeros proyectos. De momento, lo que destaca el primer edil es su apuesta por la discreción y el consenso: efectivamente, no se conocen medidas llamativas, mientras se vislumbra un trabajo de cocina con el resto de los grupos.

El primer objetivo que se impuso Patxi Lazcoz pasaba por calmar la vida municipal y ciudadana, que en los dos últimos años había vivido en continua crispación. "Y se ha conseguido, como lo prueba la apuesta de todas las fuerzas políticas por avanzar en proyectos comunes", apuntan fuentes de la alcaldía.

Una de estas iniciativas consensuadas es el soterramiento del ferrocarril a su paso por el centro de la ciudad, el mayor proyecto de infraestructuras que abordará la ciudad. Lazcoz se ha propuesto comenzar con las obras en este mismo mandato, al tiempo que levanta la estación intermodal, cuya inauguración está prevista en este cuatrienio.

Propuesta de acuerdo

El alcalde mantiene vigente el pacto de vivienda que sellaron en el anterior mandato socialistas, populares y PNV. Eso sí, tal y como adelantó el concejal de Urbanismo, Juan Carlos Alonso, se trabajará en su ampliación con el impulso de la vivienda tasada.

En su apuesta por un transporte público que atienda la nueva ciudad, Lazcoz ha impulsado ya la nueva línea Salburua-Zabalgana que une los dos nuevos barrios de Vitoria, mientras prosiguen las obras del tranvía.

La atención a los barrios que recogía en su programa electoral ya da sus primeras acciones, con el cambio de orientación de la policía de proximidad, que pasará del anterior fin recaudatorio a labores de atención al ciudadano.

El portavoz del PP y ex alcalde, Alfonso Alonso, criticó ayer, sin embargo, lo que consideró falta de ilusión y de ambición del actual equipo de gobierno, además de un "pacto secreto" con el PNV. Alonso reclamó un acuerdo de todos los grupos sobre los grandes asuntos que atañen a la ciudad: plan de movilidad sostenible; nuevo Plan General de Ordenación Urbana y expropiación de terrenos en el sur de la ciudad para fines medioambientales.