Los restauradores arremeten contra el "intervencionismo" de la Generalitat
El Gremio de Restauración de Barcelona arremetió ayer contra la Generalitat por el "excesivo intervencionismo" con el que actúa al querer prohibir fumar en todos los bares de Cataluña donde se sirven alimentos. "Se trata de una medida que no ha sido pactada y que va afectar a los empresarios, en un contexto de recesión económica en la que ya se están reduciendo los márgenes de beneficio", dijo un portavoz del gremio.
Los hosteleros critican la "falta de reflexión" con la que, en su opinión, actúa el Gobierno catalán y anuncian que "se producirá una discriminación" entre los empresarios de las distintas comunidades autónomas. Sostienen que la ley del tabaco ha supuesto pérdidas para los bares ubicados en centros comerciales o estaciones de tren. Ayer, en un café la estación de Sants fumaba quien quería y además se habían eliminado los paneles de separación con la estación.
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