A un solo punto de la leyenda

España perdió ayer la final del Eurobasket ante Rusia y lo hizo de la manera más taquicárdica posible. A dos segundos del final del partido los rusos adquirieron ventaja de un punto gracias al lanzamiento de Holden, el base estadounidense nacionalizado ruso, que botó una, dos veces, en el aro de la canasta ante de colarse y silenciar el abarrotado Pabellón de Deportes de Madrid.

A España le quedaban dos segundos para remontar un punto y alcanzar su gran sueño: unir el título europeo al mundial, algo que jamás logró ninguna selección de un año para otro. La jugada ideada por el seleccionador, Pepu Hernández, acabó en manos de Pau Gasol, el mejor jugador español de la historia. Gasol lanzó, la pelota se paseó por el aro y cayó al vacío, fuera de la canasta. El mejor equipo que jamás tuvo España acababa de perder el Europeo, en casa y en el último segundo (59-60). Las lágrimas de los jugadores duraron poco. Lo que tardó el público en saludarles con una estruendosa ovación.