Locos por Mouret
El conocido creador del Galaxy regresa a las pasarelas con su nueva marca RM
Estaba en lo más alto cuando se fue. Era octubre de 2005 y Roland Mouret, de 44 años, había escapado a la (difícil) suerte del diseñador independiente gracias a un vestido de nombre sideral. El Galaxy era un diseño que enfatizaba y reivindicaba las curvas femeninas tras años de líneas andróginas. Una pieza que recordaba con nostalgia la elegancia de otro tiempo y que, tal vez por eso, fue abrazada con fervor por actrices deseosas de proyectar una imagen distinguida. Scarlett Johansson, Rachel Weisz o Cate Blanchett sucumbieron a su marcada cintura y el mundo las siguió. Las copias proliferaban y los periódicos le dedicaban largos artículos. El pasado 4 de julio, en París, presentó su colección de retorno. No puede utilizar su nombre y en la etiqueta pone RM. Se sabía que la relación de Mouret, el hijo de un carnicero nacido en Lourdes (Francia) y formado en Londres, con sus socios no era de las mejores.
"Para mí siempre se trata de las formas del cuerpo de la mujer", ha dicho Mouret tras su primer desfile
La inversión de Sharai Meyers y su marido había hecho posible, en 2003, el salto a la Semana de la Moda de Nueva York, donde un desfile no cuesta menos de 150.000 euros. Sin embargo, con el éxito llegaron las diferencias. Y la desaparición de Mouret de escena. No hay mejor prueba de cuánto se sintió esa pérdida que el calor con el que ha sido de nuevo bienvenido. Los 21 geométricos conjuntos que mostró hace tres semanas, en sobrios grises, negros y blancos, condensan su filosofía estética. "Para mí siempre se trata de las formas del cuerpo de la mujer... Nunca olvidaré el Galaxy y las oportunidades que me ha dado, pero quería crear una nueva silueta femenina. Aquello fue el pasado, esto es algo nuevo", declaró al periódico The Daily Telegraph tras el desfile en el Museo de Arquitectura.
En primera fila, sus padres y, sobre todo, el hombre que ha hecho posible la reaparición de Mouret: Simon Fuller. El manager de las Spice Girls, creador de Pop Idol y gestor de la factoría Beckham se embarca así por primera vez en el negocio de la moda. Su entrada en la historia explica que, usted, seguramente, ya haya visto las nuevas creaciones de Mouret, pensadas para el verano de 2008: Victoria no ha dejado de lucirlas en su ultrapublicitado desembarco en Los Ángeles.
Resulta difícil esquivar el bombardeo de imágenes de ese entallado vestido fucsia con pliegues en el cuello y en las caderas. En un derroche de imaginación semántica, la nueva pieza de culto se llama Moon y, nótese la ironía, Vicky Beckham lo llevó en la presentación de su marido como jugador del equipo Galaxy. Muchas más se mueren por tenerlo, pero ella (que, según Mouret, se ha quedado casi toda la colección) aprovecha para disfrutarlo en exclusiva. Las que estén dispuestas a pagar 2.200 euros por él pueden hacer un pedido ya mismo en www.net-a-porter.com, pero no lo recibirán hasta el mes de noviembre. En esta tienda virtual no revelan el número de peticiones recibidas hasta el momento, pero la expectación parece estar a la altura de los precios.
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