La policía desarticula una banda criminal asentada en la Costa del Sol

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía desarticularon ayer una banda criminal que estaba sentada en la Costa del Sol. Sus ocho integrantes -siete de nacionalidad francesa y un italiano- están acusados de asesinatos, secuestro, tráfico de armas y drogas, atracos y robo de vehículos. En la operación, conocida como Arenal, se han intervenido numerosas armas de fuego, munición, chalecos antibala y "material de última tecnología" en cuatro viviendas en distintos municipios de Málaga. La policía también les ha encontrado vehículos de lujo, joyas y 1.500 kilos de polen de hachís.

La investigación culminó ayer con la entrada en prisión de los miembros de la organización. Después de prestar declaración en un juzgado de Marbella, sus principales líderes ingresaron en la cárcel bajo "fuertes y estrictas medidas de seguridad".

Dos de ellos estaban reclamados por la justicia española y un tercero, Thyerri F., ya cumplió condena en España en 1998 por el asesinato de un guardia civil en Despeñaperros (Jaén), y tiene una cuenta pendiente de 35 años de prisión en su país, junto a su mujer, Sarah D. S., miembro también de la banda.

Las primeras investigaciones se llevaron a cabo en Marbella, en una casa en la urbanización El Arenal, donde tres miembros de la "cédula principal", conocidos por su "extrema peligrosidad", preparaban las distintas acciones delictivas y se citaban posteriormente. En esta acción detuvieron a Hakim Medi M., de 25 años, y a Ahmed B., de 24.

En Cerro de Artola de Benahavís detectaron otra vivienda habitual de los delincuentes. Acudían a la casa de noche, mantenían actividad hasta altas horas de la madrugada y planeaban sus acciones criminales. La policía dio con Thierry F. y su mujer.

El tercer domicilio se localizó en Coín, un chalé que servía de base a la organización y donde secuestraron y torturaron varios días a dos holandeses que querían intercambiar por drogas. En Mijas-Costa se capturó a Raouf Ben B., en la urbanización de Calal Hills, y se le incautó documentación falsa. Paolo Antonio G., José Luis F., François Miguel M. y Raouf Ben B., fueron apresados días antes de los registros, acusados de proporcionar infraestructuras a la banda.