El placer del molinillo

Blancas: C. Chaurang (Francia).

Negras: B. Moore (Reino Unido).

Defensa Siciliana (B66). La Haya, 15-7-1957.

El lector de bajo nivel técnico quedará extasiado ante la erupción de belleza en el remate de esta partida, jugada hace exactamente medio siglo en un torneo internacional juvenil. Y el lector experto la encontrará aún más impresionante que la disputada por Carlos Torre y Emmanuel Lasker en 1925 (véase EL PAÍS del 18 de febrero) porque hay un doble sacrificio, de torre y dama, y no es tan fácil ver con antelación la jugada 24 de las negras. Se trata del famoso tema táctico del molinillo (también conocido en la jerga como abrecierra), presente en algunas de las combinaciones más brillantes de la historia: 1 e4, c5 2 d4, c - d4 3 Cf3, Cc6 4 C - d4, Cf6 5 Cc3, d6 6 Ag5, e6 7 Dd2, a6 8 0-0-0, h6 9 Af4, e5!? 10 C - c6, b - c6 11 A - e5, Ag4 12 A - f6, D - f6 13 Ae2, Ae6 (el peón de más blanco no es decisivo: las negras tienen dos alfiles para atacar al rey en una posición abierta; aún hay mucha partida) 14 f4, Ae7 15 The1, 0-0 16 Af3, Tab8 17 e5, d - e5 18 f - e5, Dh4 19 Ce4, Ad5 20 Rb1, D - h2 21 Te2, D - e5 22 Cc3 (diagrama) (Chaurang está convencido de que su doble sacrificio de peón ha sido una buena idea, porque ahora tomará en d5, eliminando el par de alfiles negros, con un juego equilibrado. Sin embargo, Moore le ha preparado una monumental sorpresa) 22... T - b2+!! 23 R - b2 (si 23 Ra1, T - a2+ 24 Rb1, Tb8+ y mate a la siguiente) 23... Tb8+ 24 Ra1 (si 24 Rc1, Aa3 mate) 24... Aa3!! 25 T - e5, Ab2+ 26 Rb1, A - c3+ 27 Rc1, Ab2+ 28 Rb1, A - e5+ 29 Rc1, Ab2+ 30 Rb1, Ac3+ 31 Rc1, A - d2+, y Chaurang se rindió porque en el final con dos peones menos no habría esperanza alguna. Correspondencia: ajedrez@elpais.es