Kanouté dice que la FIFA le falta al respeto a África

El delantero maliense del Sevilla, Frédéric Kanouté, nunca se ha callado o quedado quieto cuando se le ha exigido como futbolista lo que no acepta como individuo. Kanouté abandonó la concentración de la selección de Malí el pasado jueves por la noche cuando la FIFA ordenó que lo hicieran tanto él como el madridista Mahamadou Diarra, y que se reincorporaran a sus clubes para disputar la última y decisiva jornada de la Liga. Las órdenes de la FIFA dejaron a Malí sin sus dos mejores futbolistas ante el partido de la fase de clasificación para la Copa de África contra Sierra Leona. "No es normal lo que han hecho con mi país, porque han cambiado la normativa en un día y han desprestigiado a mi país, al ser africano y no europeo. Es indignante lo de la FIFA, que tampoco ha aguantado la presión del Real Madrid", se quejó.

Y es que, para Kanouté, jugar con Malí es una cuestión que va más allá del fútbol. Nacido en Francia, jugó con la selección gala sub 21 pero aprovechó un cambio en la reglamentación para elegir al país africano, con el que disputó la Copa de África de 2004, lo que le trajo problemas con su club, el Tottenham Hotspur. Con el Sevilla también chocó al cubrirse con esparadrapo la publicidad por cuestiones religiosas en la final de la Supercopa, en la que los sevillistas se impusieron al Barcelona el pasado agosto. "Han tenido un año para arreglar el calendario. En África el fútbol es un sentimiento muy grande y Malí se queda sin sus mejores jugadores para un partido importante. La gente tiene que entender mi enfado", dijo Kanouté.

El Sevilla tendrá al delantero contra el Villarreal, aunque no a los sancionados Javi Navarro y Dragutinovic; los lesionados Renato, Adriano y Navas, ni a Alves, concentrado con Brasil para la Copa de América, aunque tiene permiso de la CBF para jugar la final de Copa, el día 23. Palop, que pasó dos días hospitalizado por unas fiebres, está convocado, aunque es duda su titularidad.