Alborch dice que existe un mar de fondo que huele a cambio

A Carmen Alborch, candidata a la alcaldía de Valencia, le importan poco las estadísticas. Lo ha dicho en alguna ocasión y ayer lo volvió a repetir ante los 9.000 participantes en el mitin de apertura de campaña. La ex ministra se mostró confiada en que el vuelco político se produzca y habló de "un cambio silencioso, poco a poco hasta la victoria final". Alborch pidió a los que ayer llenaron la Fonteta que lleguen al 27 de mayo "con orgullo y con la cabeza bien alta" porque "la encuesta que vale es la última y hay que trabajar para conseguir todos los votos y convencer a la gente de que la ciudad será mejor" si gobierna el PSPV.

La candidata municipal añadió que los socialistas están "llenos de esperanza" y manifestó que lo tienen que hacer ahora es "convencer a la gente" de sus razones porque tanto en la comunidad autónoma como en la ciudad de Valencia existe un mar de fondo que huele a cambio.

Alborch apostó por otro talante de gobierno, donde el enfrentamiento y la sumisión que caracterizan a la alcaldesa Rita Barberá, den paso a la cooperación y el diálogo.

Uno de los momentos más celebrados por el público, incluido el propio Zapatero, fue cuando tocó el tema de la vivienda. "No puede ser que en Valencia existan 60.000 viviendas vacías y 30.000 jóvenes se hayan tenido que ir fuera de esta ciudad", dijo.

Viviendas y 'escoletes'

Alborch ofreció su apoyo a la plataforma de la subestación de Patraix, con los que se ha comprometido a negociar su traslado si accede a la alcaldía, y también defendió la continuidad del Cabanyal con su configuración actual. "Hay razones para la esperanza", agregó la candidata, que prometió 6.000 viviendas de protección oficial en la ciudad, la creación de una escoleta infantil por cada distrito de la ciudad, y la cesión de suelo para construir nuevos centros de salud.

La ex ministra de Cultura aludió también sin mencionarlo expresamente, a la polémica de la Fórmula 1, cuando subrayó que nadie puede suplantar la voluntad de los valencianos.

Desde el patio de butacas, Etelvina Andreu y Juanma Calles, cabezas de cartel del PSPV en Alicante y Castellón, respectivamente, aplaudieron animadamente a su colega de Valencia. Andreu, candidata a una de las plazas donde la victoria está más al alcance de la mano para los socialistas, contará en unos días con el respaldo de Zapatero.

Los candidatos municipales de las tres capitales, a los que se unió el de Elche, Alejandro Soler, se unieron a Zapatero y Pla al final del mitin.