A más presión, mayor motivación

El domingo, en su casa del Vallés, remató al mismo tiempo que Alves fallaba solo ante Casillas. A Xavi no le sirvió de nada y desde el sofá contempló la victoria del Madrid sobre el Sevilla con la misma implicación que cualquier barcelonista: "El partido estuvo ahí y en otras jugadas: fue bonito, atractivo y pudo pasar cualquier cosa". Samuel Eto'o, lugarteniente de Puyol en el vestuario, el jugador que más años lleva en el Barça, habló en nombre del grupo y claro. "Sabemos que van a ir a por nosotros, que tratarán de desestabilizarnos, y estamos preparados. Quedan cinco finales y hay que ganarlas. Así seremos campeones", simplificó el camerunés.

Convencido de que el equipo azulgrana rinde mejor bajo presión por más que algunas finales perdidas digan lo contrario, los técnicos se frotan las manos. "Las sensaciones son buenas", coinciden. Será porque Ronaldinho pasa y se ríe -ayer compareció más que distendido en el entrenamiento-, Eto'o las enchufa y Xavi, ejerciendo de veterano, no se achanta. Así, no se arruga el Barça, aunque sabe el jugador que será dura la competencia hasta el final. "La Liga se decidirá en la última jornada. Tocará sufrir. Pero, si les dieran a elegir, todos querrían estar en nuestra situación. Tenemos la sartén por el mango", dice retando a sus perseguidores.

"Un gran campeón necesita tener detrás a un equipo fuerte como el Madrid", dice Eto'o

Xavi entiende que es el momento de soportar la presión: "Nosotros la vamos a aguantar". Pero sabe, por culé, que la afición anda inquieta. Tiene remedio: "Que se aguante los nervios. No creo que le estemos dando razones para sentirse nerviosa. Va con su manera de ser, un poco sufridora", asume.

"En mi edificio vive una señora mayor y cada vez que me la encuentro en el ascensor me dice: "¡Uy, Samuel, madre mía, ayer casi me muero!", explicó Eto'o. "Yo le digo que no se va a morir; que, al final, alcanzaremos el objetivo y el premio sabrá mejor", concluyó el delantero, que parece haber aprendido cómo vive el buen culé. El ariete lo tiene claro. "Otro diría que preferiría tener al Madrid a nueve puntos, pero un gran campeón necesita que el que le siga esté fuerte. El Madrid lo está y eso nos hace aún más fuertes", dijo; "cuando pasas apuros en tu vida, valoras lo que tienes". Así que saborea los goles que mete ahora de manera muy especial.

Cinco meses de baja son muchos. Tanto tiempo que Eto'o reconoce que no es el mismo sobre el campo. "Lo seré, pero aún no he llegado a mi nivel. Acabo los partidos que parece que me hayan dado una paliza. En Anoeta me faltaba aire", reconoció ayer Eto'o, cuyos registros, sin embargo, son impresionantes. Lleva diez goles este año: cuando se lesionó, había jugado cuatro partidos y sumaba cuatro; tras su regreso, el 4 de febrero, ha jugado diez y suma seis. Total: un gol cada 102 minutos y una media de 0,71 por partido.

El último, con dedicatoria a Valdés, generó polémica. Ayer se explicó: "Lo tenía pensado. Víctor siempre levanta los brazos solo, pobre. Los otros diez nos juntamos. Así que pensé: 'Si marco le iré a buscar'. Pero el gol es de Ronnie; lo fabricó él, yo sólo empujé el balón y después de abrazarme a Víctor busqué a Ronnie el primero". Eto'o echa cuentas y sabe que con 15 puntos serán campeones. "Lo podemos conseguir", avisa. ¿Y goles? ¿Cuántos? "No sé, hermano".