Viqueira, de ídolo a rebelde

El antiguo ídolo del Recreativo se ha convertido en un rebelde que finge una lesión para no jugar, rechaza renovar su contrato y quiere irse libre a otro equipo. Así ve el conjunto onubense a Emilio Viqueira. Su contrato finaliza en junio y recoge una cláusula que ha desatado la discordia: si Viqueira juega tres partidos de Liga más -quedan 11-, y al menos 35 minutos en cada uno, renovará automáticamente por una temporada. Justo lo que pretende evitar Viqueira. "Con 32 años, no quiero firmar sólo un año. Me quedan dos o tres por delante, pero en el club piensan que menos", se queja.

"Defiendo mis intereses", añade el futbolista. Por ello envió un escrito a la Federación en que pedía eliminar la cláusula. "Quiero quitarla y empezar de cero la negociación", expresa Viqueira. "Él mismo la solicitó cuando firmó el contrato [en febrero de 2005]", responde el Recreativo, que sospecha que fuerza su salida para cobrar más en otro equipo. "Nos dijo que su deseo es irse. Si denuncia al club es que no quiere seguir. Rechazó una oferta por dos temporadas", argumenta el secretario técnico, Óscar Arias.

El enfrentamiento se ha enquistado y el Recre acusó al futbolista de fingir una lesión para no jugar. "Tenía un edema en el pubis y estuve 10 días parado. Pidieron pruebas médicas", lamenta Viqueira. Indiscutible en la Liga, ha pasado el último mes en la grada, relegado por el técnico, Marcelino, mientras dura el conflicto. "Esto afecta al equipo", cuenta el entrenador. "Me ha dolido que se desconfiara de mí y que se meta por medio al técnico y a mis compañeros, que son sagrados", añade Viqueira.

El Recreativo ha recurrido a sus abogados. "Nunca haré nada de espaldas al Recre. Se ha hablado de otros equipos y es mentira", dice el jugador. "Nos pidió que le quitáramos la cláusula y nos negamos. Él no quiere continuar. Si cumple la cláusula, renovará", asegura el consejero delegado, Michael Dumois. "¡Que diga públicamente que se quiere ir!", dice el presidente, Francisco Mendoza.

Viqueira es el jugador con más partidos en la historia del Recre. El Mago, como le bautizó Lucas Alcaraz, ha vivido un ascenso a Primera y una final copera. Pero su brillo se apaga.