Dos hombres resultan heridos graves en incendios registrados en Puente de Vallecas y Carabanchel

Dos incendios se registraron ayer en sendas viviendas de los distritos de Puente de Vallecas y Carabanchel con el resultado de dos personas heridas de gravedad.

El primer siniestro ocurrió hacia las 11.15 en un bajo del número 17 de la calle de Angelillo, próxima a la M-40, en el barrio de Palomeras Sureste (Puente de Vallecas). Un matrimonio, ambos de 82 años, habitaban la vivienda en una de cuyos cuartos comenzó el fuego. El hombre resultó herido grave debido a la inhalación de humo y anoche estaba ingresado en el hospital 12 de Octubre. Su esposa sufrió una intoxicación más leve y se recupera en el Gregorio Marañón. Dos dotaciones de bomberos extinguieron las llamas en menos de media hora, según un portavoz de Emergencias Madrid.

La pareja se dejó abierta la puerta de su casa al huir del fuego por lo que, alimentado por el oxígeno que había en el rellano, el humo ascendió por el hueco de la escalera. Los bomberos confinaron al resto de vecinos del inmueble en sus casas hasta que pasara el peligro, pero un hombre de 27 años y una mujer de 94 resultaron también intoxicados levemente. Sólo la mujer hubo de ser trasladada al servicio de urgencias del hospital Gregorio Marañón.

El segundo incendio ocurrió a las 17.15 en el barrio de Puerta Bonita, en Carabanchel. Las llamas prendían a esa hora en un sofá cama de un primer piso en la calle de Albares de la Ribera, 38. El incendio fue sofocado rápidamente por los bomberos pero un hombre de 40 años que habitaba la casa resultó herido grave por quemaduras en el rostro e inhalación de humo. Facultativos del Samur-Protección Civil lo trasladaron a la unidad de quemados del hospital de Getafe.

Al igual que en el primero de los siniestros, el fuego "rompió por fachada": se alimentó del aire libre al consumir una ventana, por lo que otros vecinos también resultaron intoxicados levemente por el humo. Fueron un hombre de 81 años y una mujer de 78, que recibieron el alta en el lugar. La madre del herido, de 70 años, sufrió una crisis de ansiedad y fue atendida por un psicólogo del Samur.