Los vigueses renuevan su afición por el concurso hípico

Sólo Athina Onassis podía hacer sombra a la magia de los saltos sobre la pista naranja de la Copa del Mundo de Vigo, que se celebró durante todo el fin de semana en el recinto ferial de Cotogrande. La nieta de Onassis puso la nota de color al concurso hípico, en el que compitió su pareja, el brasileño Álvaro de Miranda. Llevando de la mano a la hija del jinete, Athina, alta y delgada, paseó su altivez sin regalar ni una sonrisa.

La nieta de Onassis y la hija de Amancio Ortega compartieron los palcos VIP

A pesar del apoyo de Athina Onassis, Álvaro de Miranda no consiguió clasificarse el sábado para la final de la Copa del Mundo, aunque ayer logró hacerse con el primer puesto del premio Chevika, en el que el español Luis Jesús Escobar Jiménez se quedó con la cuarta plaza. Mejor suerte que Álvaro de Miranda en la Copa del Mundo tuvo sin duda el suizo Steve Guerdat, ganador de la prueba, que se disputó la tarde del sábado. Guerdat y su yegua Jalisca Solier hicieron en su serie un tiempo de 80 segundos y terminaron sin fallos, lo que les dio el pase directo a la final, que Guerdat disputó con pesos pesados como el británico Michael Withaker o la francesa Eugénie Angot.

Withaker se llevó, de hecho, la mayor ovación durante la entrega de premios. El británico cae bien en Vigo, ciudad a la que es fiel, como la mayor parte de los jinetes de este exclusivo círculo hípico. Según la organización, una de las grandes bazas de Vigo es el recinto. El Instituto Ferial de Vigo (Ifevi) deja su lastre de hormigón para convertirse durante el Concurso de Saltos Internacional (CSI) en un torbellino de gradas y arena anaranjada con una superficie de competición mayor que la de circuitos tan importantes como Londres.

Otra baza es el público. A muchos vigueses les encanta la hípica, abarrotan las gradas durante el fin de semana y aplauden constantemente, lo que obliga al presentador a pedir silencio varias veces, ya que los caballos se ponen nerviosos ante el ajetreo.

La adoración por Withaker llevó al público a compartir un grito desesperado durante su recorrido en la final, cuando arañó la victoria, que se escapó de las patas de su yegua Insul Tech Portofino 63 al derribar un poste del último obstáculo. Aun así, según los expertos, le hubiesen faltado unas décimas para superar a Guerdat. Withaker tuvo que conformarse con el octavo puesto.

Desde la exclusiva zona VIP, donde la gente paga hasta 900 euros por un palco, siguió muy atento la Copa del Mundo el dueño de Inditex, Amancio Ortega, que comparte con el presidente de Pescanova, Manuel Fernández de Sousa (gran impulsor de este evento hípico), la afición de sus hijos por la equitación.

Marta Ortega pasó inadvertida en Vigo. Es, como Athina Onassis, una gran heredera, aunque pocos la reconocían el sábado en Cotogrande. Lo mismo le sucedió al hijo del ex ministro José Bono, que compitió el viernes pero no logró clasificarse para las series finales. Tampoco lo logró el único vigués en la pista, Carlos Domínguez. Terminó su ronda con 16 puntos de penalización, lo que le impidió acceder a las series del sábado. Aunque el plato fuerte era la final del sábado, el CSI ha llenado Vigo de afición equina durante más de una semana. Todas las tardes hasta el viernes se celebraron distintos espectáculos, e incluso el sábado, tras la Copa del Mundo de Saltos, la fiesta continuó con la actuación favorita de los numerosos niños del público, la de los ponis, que se alargó hasta la medianoche, hora a la que comenzó a disputarse el Premio Pescanova, que ganó Harrie Smolders. Ayer, los caballos que han vivido estos días en Cotogrande se despidieron disputando otros cuatro premios.

Culmina así una semana intensa, que ha reunido en Vigo a doscientos caballos, algunos de ellos los mejores saltadores del mundo. Es el caso del más veterano de la pista, el del colombiano nacionalizado italiano Juan Carlos García. Se llama Loro Pina y tiene 19 años. La edad no le impidió alcanzar el tercer puesto en la final de la Copa del Mundo. Las decepciones fueron para Cayetano Martínez de Irujo y Tina Lund. Ninguno logró acceder a la final del campeonato.