El Madrid descubre que no puede fichar a Oliveira

Pedja Mijatovic, director general de fútbol del Madrid, descubrió ayer que las leyes de la FIFA le prohíben sustituir a Ronaldo por Oliveira. La sorpresa sobrevino a pocas horas del cierre del mercado invernal de fichajes. Después de apresurarse a traspasar a Ronaldo y tras repetir que no ficharían más jugadores, que incorporar más delanteros era algo innecesario, los técnicos del Madrid lanzaron una ofensiva por el punta brasileño del Milan. La intención se malogró pronto. Reunido ayer con el administrador delegado milanista, Adriano Galliani, para tratar el asunto, Mijatovic dio su plan por fallido. El Madrid deberá superar su peor racha goleadora en 16 años sin Ronaldo y sin un nueve de repuesto.

El equipo afronta la peor racha goleadora en 16 años sin Ronaldo y sin un 'nueve' de repuesto

Galliani reveló el impedimento ayer por la tarde, tras almorzar con Mijatovic y Capello en un asador madrileño. Según dijo el administrador, Oliveira ha jugado en dos clubes desde julio de 2006, el Sao Paulo y el Milan. El reglamento de la FIFA limita la militancia de los jugadores a dos clubes por temporada. Para hacer una excepción es preciso solicitar a la FIFA un permiso. Para apelar a la circunstancia eximente, la FIFA requiere un plazo. El Madrid no cumple con este requisito. La impericia burocrática no tendría más relieve de no ser porque el equipo lleva cuatro goles en los últimos siete partidos.

El viaje a Villarreal abrió los ojos de Mijatovic. Tras presenciar en directo cómo el Madrid era incapaz de meter un gol, el dirigente comenzó a sentirse inquieto. El rendimiento anotador de la plantilla no invita a la euforia. Van Nistelrooy lleva diez goles en Liga. Sobre el holandés recae el peso de la definición. Lastrados por los vaivenes tácticos de Capello, sus compañeros en el ataque no aportan demasiado. Robinho (1), Raúl (3), Reyes (3), Guti (0), e Higuaín (0) suman un total de siete tantos en el campeonato.

Hasta el sábado pasado la falta de gol no alarmó a los responsables técnicos del Madrid. "No me preocupa", repitió Capello durante todo el mes de enero, cada vez que le preguntaban por el escaso acierto de su equipo. El italiano se ocupó de vender a Ronaldo. Cuando pensó en la necesidad de meter goles ya era tarde. Se le interponen las normas de la FIFA.

El Madrid no pasó de la fase de improvisación. Falló su cuerpo técnico y su equipo jurídico. Ante una situación similar, el Liverpool actuó con un mes de antelación. El entrenador español Rafa Benítez remitió una carta a la FIFA solicitando autorización para fichar a Mascherano, que desde julio ha jugado en el Corinthians y en el West Ham. El martes, la FIFA autorizó el traspaso. Ahora, el medio centro argentino podrá enfundarse la camiseta del Liverpool sin impedimentos.

En el vestuario del Madrid lamentan la marcha de Ronaldo. Lo dijo ayer Helguera: "Es una pena, porque como compañero ha sido una de las mejores personas que han pasado por aquí. Habrá tenido sus diferencias con Capello. Era difícil que jugara y se ha tenido que marchar (...). Para mí sigue siendo el mejor goleador del mundo, pero no le salieron las cosas cuando le permitieron jugar (...). Yo pienso que no era necesario llegar a este extremo".

Ronaldo llevaba un gol en la Liga. Sin jugar mucho. Disputó 320 minutos. La situación de Oliveira en el Milan no es mejor. El ex delantero del Valencia y el Betis es el suplente del suplente. Inzaghi y Gilardino le ganaron la posición. Silvio Berlusconi, el propietario del Milan, se maldice por haber pagado 18 millones de euros por un delantero tan melancólico y poco eficaz. Oliveira ha hecho un gol en la Liga italiana.