Gloria a destiempo

El sorteo de los cuartos de final de la Copa del Rey trajo una interesante sorpresa para la competición en sí y una malquerida obligación para los clubes sevillanos. El Sevilla pelea por el liderato de la Liga por primera vez en décadas, mientras que el Betis lucha por alejarse de los puestos que llevan al descenso a Segunda. A ninguno de los dos equipos les venía bien un enfrentamiento tan emotivo a estas alturas de competición. Así, Sevilla y Betis se enfrentarán en tres ocasiones a lo largo del mes de febrero: Esta noche y el día 28 en lo que corresponde a la Copa y el 10 de febrero el de la segunda vuelta de la Liga. El Sevilla disputará además el encuentro de ida de los dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA contra el Steaua de Bucarest el día 15 en la capital rumana.

El presidente del Betis dice que si eliminan al Sevilla, "la temporada estaría salvada"

Un derby sevillano no es un encuentro normal, y tres en un mes pueden ser una indigestión. En el seno del Sevilla se recibió la noticia del emparejamiento copero con no demasiado entusiasmo. El equipo arrancó 2007 con una ristra de malos resultados y el equipo empezó a dar claros síntomas de cansancio. Además, el mes de febrero estaba señalado en rojo en la agenda de Juande Ramos como uno de los momentos clave de la temporada, una serie de partidos en los que no se puede perder el ritmo si se quiere seguir en la lucha por la Liga y la UEFA. Uno de los miembros del cuerpo técnico sevillista llegó a asegurar en privado que hubiesen preferido a cualquier contrincante en los cuartos de la Copa con la excepción del Barcelona, otro rival "directo".

Este tipo de encuentros pertenece más a los aficionados que a los profesionales. Así, los forofos del club de Nervión aspiran a demostrar también en la Copa la superioridad actual de su conjunto sobre el rival en la Liga. Por si acaso, Juande Ramos rechazó ayer que se considerara a su equipo como el favorito apelando, precisamente, a la situación crítica de su contrincante y al hecho de que el partido de vuelta se dispute en Heliópolis.

Muy diferente es la situación en Heliópolis. En la eliminatoria anterior contra el Real Madrid, el entrenador verdiblanco, Luis Fernández, insinuó con la posibilidad de dejar a un lado la lucha por la Copa. Pero los resultados -dos empates: 0-0 en Sevilla y 1-1 en el Bernabéu- hicieron que los verdiblancos se clasificaran incluso después de haber alineado a un equipo de circunstancias y con dos canteranos en Madrid. El enfrentamiento con el Sevilla fue recibido como una oportunidad de enmendar la, hasta el momento, pésima temporada de los béticos.

El presidente del club, José León, ha llegado a asegurar a lo largo de la semana que si lograran eliminar a los sevillistas "la temporada estaría salvada". Además, si superan al Sevilla, en el club nadie oculta que reeditar el título de hace dos años, se convertiría en una prioridad para el club.

Por el momento, Luis Fernández ha convocado a todos los disponibles y en el Sevilla hasta el tocado Jesús Navas se postula para disputar el derby, un enfrentamiento que vendrá a deshora, pero que nadie se plantea siquiera no ganarlo. Cueste lo que cueste.