La bajada de bandera de los taxis subirá un 65% las noches de sábado y domingo

Volver a casa en taxi después de un cine o unas copas las noches del fin de semana va a salir bastante más caro a partir de enero de 2007, y quizá incluso antes. El Ayuntamiento pactó ayer con las asociaciones de taxistas una bajada de bandera de 2,90 euros los sábados, domingos y festivos entre diez de la noche y seis de la mañana. Eso supone elevar un 65% de golpe la tarifa actual (1,75 euros), que no hace distinción entre horario nocturno y diurno. El gobierno municipal justifica la medida en la necesidad de "incentivar" a los taxistas para que trabajen las noches de fin de semana (cuando más demanda hay), y quiere aplicar la tarifa ya estas navidades, sin esperar al nuevo curso. La asociación de usuarios Cecu ha puesto el grito en el cielo.

En Madrid hay 15.600 taxis, y generalmente resultan suficientes para atender la demanda de cualquier día laborable. Pero en fin de semana, en una ciudad caracterizada por su ocio nocturno, la demanda se dispara: a ciertas horas de la madrugada hay miles de personas buscando taxi y sólo un tercio de los coches (unos 5.000) en circulación, según admite la Asociación Gremial del Auto-Taxi, mayoritaria en el sector. "A esas horas a nadie le gusta trabajar", dice su presidente, Eladio Núñez.

Con ese argumento han presionado los taxistas al Ayuntamiento a la hora de negociar las tarifas de 2007: si quieren que haya más taxis las noches de fin de semana, que nos paguen más, han venido a decir. Y el gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón ha aceptado.

El taxi es un servicio público y la ordenanza municipal prevé que, "atendiendo las necesidades públicas", el Ayuntamiento pueda "determinar el horario mínimo de servicios a prestar [...], en forma que quede suficientemente garantizada la continuidad del servicio". Pero el Ayuntamiento no se ha planteado obligar a los taxistas a que saquen más coches los fines de semana, porque esa potestad se ejerce sólo en "circunstancias excepcionales", según Fernando Autrán, coordinador general de Servicios a la Comunidad. "Y que el pueblo de Madrid salga de copas los fines de semana no es una circunstancia excepcional", agrega.

Así que el concejal responsable de Movilidad, Pedro Calvo, se reunió ayer por la mañana con Eladio Núñez y pactó una subida de tarifas que, por la tarde, acordó también con la otra gran asociación del gremio, la Federación Profesional del Taxi. El pacto debe ser refrendado aún por la Comisión regional de Precios, presidida por la Comunidad de Madrid y en la que están presentes sindicatos, patronal, usuarios y, en nombre de los ayuntamientos, el de Guadarrama (PP).

La propuesta es la siguiente: las tarifas generales (bajada de bandera, kilómetro recorrido, suplementos) subirían un 5,8%, algo más que el IPC del sector transporte. Pero, además, se crearía una bajada de bandera "especial" para sábados, domingos y festivos en horario nocturno (la noche del viernes se salva) de 2,90 euros. Ahora la bajada de bandera (1,75 euros) es la misma siempre, independientemente de día y horario.

"Es una subida considerable, pero inferior a la que aplican otras ciudades españolas", alegó Pedro Calvo. En Barcelona, por ejemplo, la bajada de bandera en noches de viernes, sábados y domingos es ya de 3,75 euros, dos euros más que el resto de días.

Este "incentivo" empujará a muchos taxistas a trabajar las noches de fin de semana, según Eladio Núñez, que calculó que habrá "entre un 30% y un 40% más de coches circulando", es decir, unos 2.000 taxis más que ahora.

En teoría, la revisión de tarifas no debe entrar en vigor hasta enero de 2007; el concejal Pedro Calvo anunció, sin embargo, que va a pedir a la Comisión regional de Precios que dé ya el visto bueno para que la tarifa especial en noches de fin de semana se aplique "antes de navidades". "Es cuando más demanda hay, y queremos que haya más taxis en la calle", argumentó el número dos de la concejalía, Fernando Autrán.